El conocimiento ancestral arhuaco como estrategia tecnopedagógica para el desarrollo de conciencia ambiental en los
estudiantes del grado cuarto del Colegio La Sagrada Familia
196
Keyla Vanessa Ariza Córdoba
María Claris Oñate Quiroz
Rolando Hernández Lazo
de la información y, con su práctica, darían
ejemplo, generando conciencia ambiental en
otras personas y aplicando los principios del
conocimiento ancestral en temas ambientales.
En el proceso de indagación, se realizó una
revisión de trabajos antecesores, de esta manera,
en el contexto internacional, se encuentra la
investigación de Arredondo et al. (2018), quienes
hacen un estudio comparativo, en localidades de
Chiapas, México, entre experiencias y prácticas
de Educación Ambiental en cuatro escuelas
primarias rurales de sistemas escolarizados
formales y el modelo educativo alternativo que
se practica dentro de una escuela autónoma,
mediante la etnografía escolar y el método
hermenéutico-dialéctico del construccionismo.
Así las cosas, al no ser sucientes las estrategias
propuestas en los libros de texto ociales,
extracurricularmente en las prácticas cotidianas,
por medio de las iniciativas de profesores y
actores externos, se llevan a cabo actividades
que tiene en cuenta el contexto ambiental y
cultural, y ponen en contacto directo a los niños
con elementos de la naturaleza, generando
una mayor motivación, signicación e interés
en los alumnos sobre los temas ambientales y
el fomento del conocimiento, la apropiación y
valoración de la naturaleza.
En relación con la anterior investigación, se
comparte la consideración de que la forma en
la que se ha venido desarrollando la educación
ambiental no ha logrado fomentar la suciente
apropiación y responsabilidad social ante las
problemáticas ambientales cotidianas; en
parte, debido a que el discurso ambientalista
reproducido en las escuelas se enmarca en una
lógica técnica y cienticista, que carece de sentido
para los estudiantes y no genera una auténtica
valoración y conciencia sobre la naturaleza. Por lo
tanto, es preciso la implementación de modelos
educativos alternativos, que partan del diálogo de
distintos saberes y conocimientos y desarrollen
estrategias pedagógicas interdisciplinarias,
interculturales, integradoras, contextualizadas y
holísticas, para la generación de un pensamiento
crítico, propositivo, y promotor de estilos de vida
más armónicos con la naturaleza (Arredondo et
al., 2018).
De esta manera, un aspecto que genera un
aporte importante para la investigación actual
y que se debe tener en cuenta es que los
estudiantes puedan tener contacto directo con
todos los elementos de la naturaleza que hacen
parte de su entorno, así se puede generar en
ellos un mayor entusiasmo al momento de
realizar las actividades propuestas y vínculos
con la naturaleza, lo que podría resultar muy
positivo en la generación de mayor conciencia
ambiental.
En el ámbito nacional, se destaca la investigación
de Garavito y Chaparro (2017), donde se realiza
un estudio de los proyectos desarrollados
en el Colegio José Félix Restrepo IED, desde
2011, que buscan integrar el saber ancestral
al aula, recurriendo a la presencia de algunos
grupos indígenas de las comunidades muisca,
arawak, misak, huitoto y ticuna, para rescatar
sus conocimientos en temas de ambiente,
cultura, comunidad y territorialidad. El enfoque
metodológico se inscribe en la investigación
cualitativa y utiliza información cualitativa y
descriptiva, ligada a la exploración etnográca.
Esta investigación resulta ser novedosa y muy
signicativa, pues se sale de los contenidos
habituales del currículo y de la cátedra tradicional
referente al medio ambiente, para darle cabida
a los saberes de los taitas, abuelos y mamos
de varias comunidades indígenas, a través del
poder de la palabra y de diferentes actividades
como talleres de canto al agua, sensibilización a
la Pachamama, ceremonias, círculos de palabra,
actividades de eco-yoga, de muralismo, música
y visitas de empoderamiento y reconocimiento
de territorios para conocer de forma holística
las formas empleadas por estos grupos para
cuidar sus territorios, recursos, comunidades, el
respeto por el agua, las especies y el ambiente
en general.
Asimismo, esta experiencia hace un llamado a los
docentes e instituciones educativas a promover
y generar experiencias interculturales, la cuales
permiten no solo contribuir a la educación
ambiental, sino también a una formación
en ética y humanidades, al fortalecimiento
de la identidad, a partir del vínculo con otras
cosmovisiones y relaciones con la naturaleza; a
la construcción de un tejido social que favorece
los sentidos de ciudadanía, al percibir lo sagrado
en la experiencia con la naturaleza, lo divino en
el compartir con el ecosistema.
De esta manera, el aporte que hace esta
investigación a la investigación actual es la
promoción de la interculturalidad a partir de
la vivencia de personas pertenecientes a la
comunidad indígena que se encuentran en la
zona de estudio, como es el caso del Colegio
La Sagrada Familia, donde hay un pequeño
porcentaje de estudiantes que hacen parte de
esta comunidad, y sus experiencias contadas
de primera mano serán un gran aporte para la
motivación de los demás estudiantes.