152
Prácticas evaluativas del profesorado en
los niveles de básica secundaria de las
sedes de la Institución Educativa Ciro
Pupo Martínez, La Paz-Cesar, Colombia
Sugeire Licet Cabana-Granados1
Héctor Heiler Camargo-Hernández2
María de las Mercedes Colina-Chacín3
Cómo citar este artículo / To reference this article / Para citar
este artigo: Cabana-Granados, S. L., Camargo-Hernández, H. H. y
Colina-Chacín, M. (2022). Prácticas evaluativas del profesorado en los
niveles de básica secundaria de las sedes de la Institución Educativa
Ciro Pupo Martínez, La Paz-Cesar, Colombia. Revista UNIMAR, 40(1),
152-174. DOI: https://doi.org/10.31948/Rev.unimar/unimar40-1-art8
Fecha de recepción: 27 de mayo de 2021
Fecha de revisión: 17 de septiembre de 2021
Fecha de aprobación: 11 de noviembre de 2021
Resumen
El objetivo del estudio fue analizar la práctica evaluativa del profesorado en
los niveles de básica secundaria en las sedes de la Institución Educativa Ciro
Pupo Martínez del municipio La Paz, del departamento del Cesar, Colombia.
Metodológicamente, se ubicó en el paradigma cualitativo, bajo el enfoque
sociocrítico, en la investigación acción que se desarrolló en descripción de la
situación problema, construcción de las bases teóricas, diseño metodológico,
trabajo de campo, análisis e interpretación de los instrumentos, implementación
de la propuesta, análisis nal, recomendaciones y conclusiones. La unidad de
trabajo fueron ocho docentes. Para la recolección de la información se utilizó
un cuestionario semiestructurado, el diario de campo y la lista de cotejo. Se
concluyó que, el profesorado es consciente de su papel, llamado a transformar
los escenarios educativos mediante la adopción de herramientas innovadoras,
apoyadas en los círculos de acción docente, con una metodología que mejore su
práctica pedagógica y los integre como equipo.
Palabras clave: Prácticas evaluativas; instituciones de básica secundaria;
innovación; profesorado.
1 Magíster en Pedagogía; Licenciada en Bacterióloga y Laboratorista Clínico. Docente Titular Institución Educativa Ciro Pupo Martínez,
La Paz, Cesar, Colombia. E-mail: sugecabana@gmail.com
2 Magíster en Pedagogía; Ingeniero Ambiental y Sanitario. Docente Titular de la I.E Las Vegas, Chimichagua, Cesar, Colombia. E-mail:
hectorcamargo02@gmail.com
3 Doctora en Ciencias Gerenciales; Magíster en Psicología Educativa; Especialista en Dinámica de Grupo. Docente, Universidad Mariana,
Valledupar. E-mail: mercede3371@gmail.com
Artículo resultado de la investigación titulada: ‘Prácticas evaluativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes
de la Institución Educativa Ciro Pupo Martínez’, La Paz, desarrollada desde septiembre de 2019 hasta el 30 de mayo de 2021 en el
municipio de La Paz, Cesar, Colombia.
153
Evaluative practices of teachers in the basic
secondary school levels of the Ciro Pupo Martínez
Educational Institution, La Paz, Colombia
Abstract
The objective of the study was to analyze the evaluative practice of teachers at
the basic secondary levels at the Ciro Pupo Martínez Educational Institution in the
municipality of La Paz of the department of Cesar, Colombia. Methodologically, it
was located in the qualitative paradigm, under the socio-critical approach in the
action research that was developed in the description of the problem situation,
construction of the theoretical bases, methodological design - eldwork, analysis,
and interpretation of the instruments, implementation of the proposal, nal
analysis, recommendations, and conclusions. The work unit was eight teachers.
A semi-structured questionnaire, a eld diary, and a checklist were used to
collect information. It was concluded that teachers are aware of their role, called
to transform educational scenarios through the adoption of innovative tools,
supported by teaching action circles with a methodology that improves their
pedagogical practice and integrates them as a team.
Keywords: Evaluative practices; secondary school institutions; innovation;
teaching sta.
Práticas de avaliação do corpo docente nos níveis do
ensino secundário básico na Instituição Educacional
Ciro Pupo Martínez, La Paz, Colômbia
Resumo
O objetivo do estudo foi analisar a prática avaliativa de professores do ensino
médio da Instituição de Ensino Ciro Pupo Martínez do município de La Paz
do departamento de Cesar, Colômbia. Metodologicamente, localizou-se no
paradigma qualitativo, sob a abordagem sociocrítica na pesquisa-ação que
se desenvolveu na descrição da situação problema, construção das bases
teóricas, desenho metodológico - trabalho de campo, análise e interpretação
dos instrumentos, implementação da proposta, análise nal, recomendações
e conclusões. A unidade de trabalho era de oito professores. Para a coleta de
informações, utilizou-se um questionário semiestruturado, diário de campo e
uma lista de vericação. Concluiu-se que os professores têm consciência de seu
papel, chamados a transformar cenários educacionais por meio da adoção de
ferramentas inovadoras, amparados por rodas de ação docente com metodologia
que aprimore sua prática pedagógica e os integre em equipe.
Palavras-chave: Práticas avaliativas; instituições de ensino médio; inovação;
professorado.
154
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
1. Introducción
Los avances a nivel global han generado
cambios, impactando el entorno; hoy en
día se vive momentos inciertos, causados
por grandes desafíos que se ocultan en el
futuro, e invaden los espacios del presente.
Las condiciones actuales han traído como
consecuencia, esa incertidumbre un tanto
desconcertante, pero observable en un sistema
educativo que se desliza sobre arena movediza,
sometido a dinámicas de transformación que
exigen el urgente acople de las herramientas
conceptuales, metodológicas y tecnológicas
utilizadas por el profesorado, para conseguir
un sentido sistémico a su práctica evaluativa.
Bajo este contexto, para Díaz y Hernández
(2007), lograr otorgar un sentido sistémico a la
práctica evaluativa requiere de la integración de
concepciones teóricas, prácticas y tecnológicas
condicionantes del proceso educativo; la
integración de estos elementos se ha convertido
en un desafío para gran parte del profesorado,
que esquiva su rol protagónico como líder
facilitador del desarrollo biopsicosocial del
estudiante, por carecer de herramientas
actualizadas que mitiguen el aislamiento
social en el que se encuentran, trasladando su
responsabilidad, a agentes externos. Por eso,
se vuelve indispensable enmarcar la práctica
evaluativa bajo parámetros de innovación y
calidad alineadas con la evolución y los cambios
constantes que vive el aprendizaje.
Acorde con estas interpretaciones, la complejidad
de las prácticas evaluativas del profesorado se
mueve en un contexto globalizado, competitivo
y de permanente cambio; sus dinámicas
se sitúan en un sistema relacional lleno de
exigencias y formas de trabajo que invitan al
docente a gestionar su desempeño personal,
conocimiento e innovación, mejorando los
ambientes de aprendizaje e incluso, lidiando
con creencias que, en oportunidades, distan
entre sí; sin embargo, son tan reales como la
transformación de la vida misma.
Este panorama permite tomar la postura
de Vargas (2014), quien dene la práctica
evaluativa como aquellas actividades que
cumple el docente, desde la construcción de sus
propias ideas cimentadas por su experiencia
y el conocimiento enmarcado en un modelo
pedagógico, en disposiciones legales y en la
capacidad de adaptación del mismo, para
responder a las exigencias del sistema. Visto
desde esta perspectiva, la práctica evaluativa
se convierte en un proceso exible que implica
valorar el aprendizaje tanto del estudiante
como del profesorado, porque son parte del
mismo sistema.
Aunado a lo anterior, es necesario visualizar las
perspectivas en esta etapa de transformación
acelerada, donde los espacios educativos,
que se ven ocupados por jóvenes centennials
(centúricos) cobijados por el mundo de la
virtualidad, caracterizados por su irrelevancia,
avance tecnológico y curiosidad, requieren
docentes comprometidos con el cambio,
considerando una práctica evaluativa
innovadora que valore los errores, a n de
favorecer un aprendizaje signicativo que
motive con resultados satisfactorios, mitigando
las percepciones erróneas existentes en el
área y enrolándolas hacia una conducta que
responda a los objetivos propuestos.
Colombia, como país latinoamericano inmerso
en esta realidad, presenta un sistema
educativo regido por una autonomía escolar
consagrada en los lineamientos de la Ley
115 de 1994, incluyendo en el Proyecto
Educativo Institucional (PEI), un sistema de
evaluación estudiantil donde los docentes
tienen la potestad para decidir las bases de
sus prácticas evaluativas que les permiten
vericar sus avances, así como el progreso de
los estudiantes, dando lugar a la elaboración
de estrategias que respondan a necesidades
especícas de cada región y del país en general
(Pizarro y Gómez, 2018). En este orden,
el Ministerio de Educación Nacional (MEN),
desde 1996 apuesta por la calidad educativa,
exigiendo a los formadores deconstruir y
repensar algunas funciones de su profesión,
de suerte que den cuenta de su experiencia
pedagógica y su práctica evaluativa; incluso,
el Decreto 1290 de 2009, en su Artículo N° 3,
hace referencia a los propósitos de la evaluación
institucional, destacando la importancia de las
práctica evaluativas e invitando al docente
a identicar las características individuales
de cada participante, de manera que le
proporcione información sobre el desarrollo de
su proceso.
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
155
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
De igual forma, los docentes colombianos
tienen la posibilidad de generar propuestas
con acciones ajustadas a la realidad, y
fortalecer sus prácticas evaluativas para
propiciar el desarrollo del pensamiento crítico
y creativo, abarcando el área cognitiva y
socioemocional del estudiante. Aun cuando la
forma de enseñar de hoy requiera el uso de las
tecnologías, tienen la capacidad de modicar
sus estructuras mentales e integrar nuevos
esquemas de aprendizaje y, de esta forma,
armonizar su coherencia entre lo que hacen y
lo que dicen. No es simplemente hablarle al
estudiante sobre lo que debe hacer; es darse
cuenta que están en una posición de modelo
para ellos; por tanto, su adaptabilidad debe
estar presente.
Esta situación de alerta en las prácticas
evaluativas hace necesaria la utilización de
círculos de crítica que marquen la reexión
docente, a n de lograr un engranaje con
los procesos de avance; de ahí que se requiere
reinventar la forma de hacer docencia, con estrategias
virtuales que vayan más allá de lo tradicional,
en términos metodológicos, reevaluando la
forma de trabajo y diseñando contenidos
dinámicos e interactivos, en función de construir
experiencias ajustadas a las interacciones, a la
par del contexto, sucesos sociales y culturales
y, reconociendo que algunos elementos serían
imposibles de controlar.
Por lo anterior, se hace imprescindible
anteponer un proceso innovador al resultado
‘cuanticable’ y, que potencie las prácticas
evaluativas del profesorado; igualmente,
cuando se establece estrategias evaluativas
enfocadas en la innovación, se aporta
experiencias con signicado, que contribuyen
directamente al desarrollo de las competencias
en el saber especíco y en el crecimiento de
quienes se dedican a la carrera docente y
formativa.
Uno de los problemas de la institución Ciro
Pupo Martínez se reeja en la carencia de
un sistema de seguimiento o monitoreo que
permita al profesorado, vericar los avances de
su práctica evaluativa y que sirva de impulso
para prepararse y desaar los cambios del
sistema, con propiedad y autoridad. En este
particular, una vez los docentes consideren la
materialización del sistema de seguimiento
de las prácticas de forma sistemática con
instrumentos que presentan indicadores de
gestión, contextualizados a la institución,
se puede vericar el avance y celebrar los
pequeños logros, sin la necesidad de llegar
al caos para resolver los desafíos que se
presenten.
Asimismo, esta forma de intervenir las prácticas
evaluativas contribuye a un cambio de actitud
y abre camino para la aplicación de estrategias
innovadoras enmarcadas en un entorno virtual,
atendiendo las circunstancias de la experiencia
y marcando la diferencia entre un antes y un
después. A tal efecto, es fundamental proponer
un sistema de seguimiento en la práctica
docente, que represente acciones especícas,
que sirva de base para evidenciar los avances
en el quehacer evaluativo, que verique y
monitoree el ejercicio, que responda a las
necesidades tanto del profesorado como de los
estudiantes, así como también a las del entorno
demandante de transformación, ofreciendo
información detallada y conducente a un
cambio de actitud, donde los sujetos se hacen
responsables de cada acción ejecutada. Por
consiguiente, las concepciones de la evaluación
del aprendizaje se convierten en objeto gradual
de las prácticas con adecuaciones oportunas,
enriqueciendo paulatinamente, la estructura
teórico-metodológica de la enseñanza y del
aprendizaje.
Es crucial que las prácticas evaluativas sean
replanteadas considerando la adaptación
de estrategias tradicionales e innovando
en otras, desde espacios virtuales, a n de
potenciar la efectividad del desempeño de los
docentes y la apropiación de competencias
con enfoques interactivos, construccionistas
e interaccionistas. En consecuencia, se puede
armar que, de continuar esta situación,
podrían verse afectados los procesos formativos
en los niveles de educación preescolar, básica y
media técnica en las sedes de esta institución,
considerando que el profesorado forma parte
del sistema y es ejemplo para sus compañeros y
estudiantes; protagonista, además, de nuevos
escenarios académicos que trascienden en el
acto pedagógico a favor del mejoramiento de
la calidad de la educación impartida.
Consiguientemente, se hace necesaria una
revisión pedagógica donde se pueda analizar
156
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
cómo es la práctica evaluativa del profesorado
en los niveles de básica secundaria de las
sedes de la Institución Educativa (IE) Ciro Pupo
Martínez, describiendo los aspectos que
condicionan la práctica evaluativa, para luego
identicar los elementos que intervienen en
ella y establecer estrategias de evaluación
ajustadas a los entornos virtuales; de este
modo y, partiendo de los resultados, proponer
un sistema de seguimiento que aporte
indicadores de gestión a n de fortalecer el
quehacer pedagógico del profesorado de la
institución. Estos planteamientos conducen a
formular los siguientes interrogantes:
• ¿Cómo es la práctica evaluativa del
profesorado en los niveles de básica
secundaria de las sedes de la Institución
Educativa Ciro Pupo Martínez del
municipio de la Paz Cesar?
• ¿Cómo son los aspectos que condicionan
la práctica evaluativa?
• ¿Qué elementos intervienen?
• ¿Cuáles serían las estrategias en las
prácticas evaluativas?
• ¿Cómo funcionaría el sistema de
seguimiento?
En consecuencia, para poder responder a estas
interpelaciones, se acudió al siguiente objetivo
general: analizar la práctica evaluativa del
profesorado en los niveles de básica secundaria;
y, como especícos, describir los aspectos que
condicionan la práctica evaluativa, identicar
los elementos de las prácticas, establecer
estrategias evaluativas y, proponer un sistema
de seguimiento.
Una vez expuestos los argumentos que
soportan la investigación, se justica su
ejecución porque pretende analizar la práctica
evaluativa del profesorado. Cabe destacar
que, para establecer una práctica evaluativa
acorde a las situaciones de la actualidad,
cada profesional debe tener presente qué
aspectos condicionantes están presentes en la
ejecución de sus funciones, considerando que
su desempeño está sujeto a su experiencia,
conocimiento, requerimientos del MEN,
necesidades de los estudiantes, entre otros,
situación que requiere la coherencia de su
accionar, con los desafíos del milenio, en su
quehacer pedagógico.
De igual manera, es importante resaltar que
las prácticas evaluativas, durante un largo
tiempo se han congurado bajo estándares
tradicionales, con la certeza de que el cambio
tecnológico tardaría por llegar. Este escenario,
aparentemente, mantenía a los actores en una
zona de comodidad, ejerciendo su profesión con
antiguas estructuras, carentes de resultados
extraordinarios. Sin embargo, el año 2020
llegó para demostrar que todo puede cambiar
de forma repentina, exigiendo al profesorado
modicar su forma de trabajo y pasar de un
proceso técnico de vericación de resultados
a uno más humano, pero con características
tecnológicas.
Esto podría originar que, algunos docentes
caigan en crisis por la ausencia de herramientas
apropiadas para llevar a cabo un proceso de
enseñanza virtual, empujándolos al avance
inmediato con lo que tengan a su disposición
y aprendiendo en el transcurso de su labor.
Por la complejidad del caso, esta investigación
se justica, pues va mucho más allá de un
simple proceso de evaluación y, toca la gestión
personal que tiene el docente frente al desafío
de innovar en entornos virtuales que demandan
conocimientos, actitud y adaptación al medio.
Destaca también, la fortaleza de cada uno de
los docentes, al poder modicar su actitud y
comportamiento, haciéndose responsables
de su propio proceso, a n de mantener la
coherencia de su discurso con los estudiantes,
sin dejar detrás la consideración de aquellos
factores que intervienen negativamente para
convertirlos a su favor y, poder adaptar las
estrategias a la realidad actual a través de un
sistema de seguimiento que permita formular
indicadores de gestión, con la posibilidad de
cometer errores, compartirlos con sus colegas
y considerar, desde un trabajo colaborativo,
el abordaje de alternativas para mejorar de
forma permanente y continua, valorando su
propio proceso.
Desde esta perspectiva, la investigación se
justica a nivel cientíco teórico, porque
se contrasta posturas de diversos autores y
se considera investigaciones y antecedentes
referidos al objeto de estudio que lo sustentan,
brindando información actualizada y pertinente
dentro del contexto educativo, que aporta
orientaciones sobre la práctica evaluativa, sus
elementos y las estrategias que la fortalecen.
En consecuencia y, de acuerdo con Rodríguez
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
157
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
et al. (2017), la investigación pedagógica tiene
una intención formadora donde los sujetos
pueden reconstruir, en medio de una relación,
sus formas de pensar, de sentir y de actuar,
en un espacio donde se pone de maniesto
el conocimiento alcanzado en su proceso
formativo especíco y general.
En cuanto al área metodológica, la investigación
se enmarca en un paradigma cualitativo
post positivista, siguiendo el método de
investigación acción (IA); de igual forma,
se diseña los instrumentos de recolección
de datos, contando con la validación de un
experto, los cuales, mediante su aplicación,
permiten sistematizar las experiencias a través
de la triangulación de los diferentes objetivos,
respondiendo a la pregunta central: ¿Cómo es
la práctica evaluativa del profesorado en los
niveles de básica secundaria de las sedes de la
IE Ciro Pupo Martínez?
Conjuntamente, el estudio orienta al
profesorado a llevar una práctica evaluativa con
una representación distinta al trabajo ordinario,
incorporando un círculo de acción crítica, como
una herramienta que permite establecer un
constante monitoreo de reexión, así como
la retroalimentación positiva y dinamiza la
experiencia, desde un sentido práctico y
motivador, donde los actores involucrados
consiguen el signicado y lo pueden trasladar
a diferentes escenarios.
Con relación al área educativa, se justica
puesto que, realizar un diagnóstico sobre los
aspectos que condicionan la práctica evaluativa,
permite al profesorado de la institución el
encuentro con la realidad y, a partir de allí,
puede tomar los correctivos necesarios para
mejorar el proceso, establecer estrategias
cónsonas a las necesidades y proponer un
plan de seguimiento para vericar los logros y
las oportunidades de mejora en un ambiente
de aprendizaje presencial o virtual, lo cual
repercute en la percepción del profesorado
sobre las prácticas evaluativas.
Por otra parte, con el propósito de fundamentar
la presente investigación, se realiza una
revisión indexada electrónica de artículos
y textos bibliográcos de diversos trabajos
publicados a nivel nacional e internacional,
que permiten sustentar el estudio con aportes
signicativos para su desarrollo. En este
aspecto, se localizó el estudio efectuado por
Perero-Alonzo y Marcillo-García (2020), sobre
prácticas evaluativas renovadas para mejorar
la calidad de aprendizaje de los estudiantes,
efectuado en la Universidad Católica del
Ecuador, cuyo objetivo fue examinar si las
prácticas evaluativas renovadas por los
docentes mejoraban el proceso de enseñanza-
aprendizaje.
Como aporte, la investigación ratica que la
evaluación, como elemento indispensable para
la enseñanza y el aprendizaje, está inmersa en
la práctica pedagógica del docente, requiriendo
del mismo, el compromiso de observar sus
avances y los de sus estudiantes, para el logro
de la excelencia educativa; además, permite
conocer cuáles son los factores incorporados
que contribuyen a mejorar las prácticas
evaluativas en el proceso educativo.
En el ámbito nacional, Guerra (2018) realizó
una investigación referida a las prácticas
evaluativas para el fortalecimiento del
desempeño académico estudiantil y calidad
educativa, en la Universidad de la Costa, cuyo
objetivo general fue diseñar una propuesta
de práctica evaluativa fundamentada en un
cuerpo de instrumentos que contribuya al
fortalecimiento del desempeño académico
estudiantil y la calidad educativa. Su aporte está
dirigido a hacerles frente a los retos que tiene
la sociedad en el ámbito educativo, deniendo
las prácticas evaluativas desde los procesos
de mediación didáctica, que constituyen el eje
central del quehacer profesoral, para facilitar
el aprendizaje estudiantil y, en efecto, mejorar
la calidad.
En el contexto regional del Cesar, se localizó
el estudio realizado por Padilla et al., (2009),
centrado en generar prácticas evaluativas
desde un enfoque pedagógico socio crítico e
intercultural y, analizar la coherencia entre
el enfoque pedagógico de la escuela y las
prácticas evaluativas que implementan los
docentes en el ciclo complementario.
Respecto a las prácticas evaluativas, que
pueden ser entendidas como aquellas acciones
pedagógicas que el profesorado ejecuta a n
de obtener información sobre el proceso de
enseñanza y de aprendizaje, se evidencia
158
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
que están relacionadas directamente con
la experiencia y el conocimiento, así como
con el desarrollo de las habilidades y las
destrezas puestas a favor del aprendizaje
de los estudiantes. Para Villada (2002),
representan la acción docente, al ser capaces
de responder a las exigencias de un sistema
educativo nacional e institucional, generando
la construcción de estrategias, procedimientos,
fundamentos y categorías que permiten realizar
una evaluación con características de calidad
y jar sus puntos de vista para, nalmente,
fortalecer un aprendizaje. Estas prácticas
exigen al profesorado, potenciar su forma de
hacer docencia, logrando otorgar un signicado
a su experiencia para, poder propiciar a los
estudiantes, oportunidades acordes con las
exigencias del entorno, respetando su rol activo
y su diversidad y, además, abriendo espacios
para la exploración de respuestas desde un
intercambio social y de conocimiento.
El MEN (2006) plantea que los docentes, como
profesionales educativos, en el desarrollo de sus
prácticas evaluativas requieren de un repertorio
especíco de métodos, procedimientos,
estructuras cognitivas, validación, aplicación
y construcción de modelos, así como también
componentes generales sobre pedagogía
didáctica, comunicación y tecnología, para
evitar obstáculos en el aprendizaje, y que
posibiliten reforzar sus habilidades y reorganizar
sus esquemas en el proceso de enseñanza,
en caso de ser necesario. Visto desde esta
perspectiva, la evaluación, como parte de la
práctica pedagógica del profesorado, no se
hace exclusiva de los estudiantes, sino que
también incluye a los actores involucrados en
el sistema; esta situación conlleva tener un
panorama claro y de calidad, antes, durante y
después del proceso educativo.
Bajo esta postura, las creencias y conocimientos
que tiene el docente sobre su práctica evaluativa,
otorgan sentido a su desempeño y, asimismo,
a la evaluación que realiza; en este orden, lo
que marca la diferencia de la efectividad en la
gestión pedagógica y las prácticas evaluativas
recae sobre la interpretación que se les
otorga a las situaciones que se presentan en
la cotidianidad. El sentido de la evaluación se
origina a partir de las creencias, el conocimiento
y las experiencias vividas por el docente,
que permiten la elaboración de constructos
mentales e interpretativos, de acuerdo con
las situaciones vividas. Ahora bien, desde una
perspectiva didáctica, se asocia con los juicios
valorativos que emiten los docentes sobre
su trabajo y las acciones que tienen con los
estudiantes (Pimienta, 2008).
De Camilloni et al., (1998) indican que, para
otorgarle sentido a la evaluación, surgen
cuestionamientos como: ¿Para qué se evalúa?,
¿Qué benécos trae para el estudiante evaluar
lo que se evalúa?, ¿Es acaso un juicio honesto
sobre lo que se considera importante? De ahí
que se pueda perder el sentido de la evaluación,
pues el docente, frecuentemente, tiende a
marcar sus indicadores sobre el resultado y
no, sobre el proceso mismo de aprendizaje.
Cabe destacar que, el profesorado de
básica secundaria de la institución Ciro Pupo
Martínez, en sus prácticas evaluativas virtuales
o presenciales, requiere exibilizar sus
actuaciones, soltando la rigidez que enmarca
el contenido intelectual, de modo que pueda
conectar con el sentido evaluativo y brindar
la oportunidad de reconocer la necesidad de
evolucionar al mismo ritmo que el entorno,
donde sus pensamientos puedan ser nutridos
en función de su crecimiento y del mejoramiento
de la calidad educativa.
2. Metodología
Para llevar a buen término el presente estudio,
se hace uso del paradigma cualitativo post-
positivista, como un modelo exible que permite
al docente investigador cuestionar, comprender
y analizar un fenómeno social determinado,
dentro de su entorno original, vericando los
factores implícitos que condicionan la práctica
evaluativa, estableciendo relaciones entre la
teoría estudiada y la realidad social analizada.
En función de lo anterior, esta investigación
se desarrolla bajo el paradigma cualitativo,
puesto que toma como problema central,
las prácticas evaluativas del profesorado,
surgiendo de las experiencias propias del
quehacer educativo, potenciando la posibilidad
de utilizar este enfoque para deconstruir y
construir las categorías y subcategorías que
derivan del objeto de estudio, especialmente
porque están relacionadas directamente con
el desenvolvimiento del ser humano en un
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
159
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
contexto real. En este caso, la investigación
cualitativa contempla los hechos observables y
externos e internos que condicionan la práctica
evaluativa, así como también los signicados,
símbolos e interpretaciones que son elaborados
a través de la interacción del profesorado con
los estudiantes y su sistema en general, a n
de descubrir lo nuevo que puede suceder en
un orden fenomenológico.
En consecuencia, la forma de hacer investigación
cualitativa permite a los investigadores
reconstruir, articular y reexionar sobre el tema
en cuestión, relacionándose directamente con
su quehacer pedagógico, que se desarrolla bajo
este enfoque y es ejecutado en los escenarios
habituales donde se realiza el trabajo educativo,
centrándose en los procesos que se generan
mediante las relaciones con los estudiantes y
la comunidad en general, pues pertenecen al
mismo sistema.
Debido a la naturaleza del estudio y a los
perles de los investigadores y, de acuerdo
con el tema ‘Prácticas evaluativas del
profesorado’, el método que marca el camino
es la investigación acción pedagógica (IAP). Al
respecto, Colmenares (2012) señala que:
La IA constituye una opción metodológica;
por una parte, permite la expansión del
conocimiento, y por la otra, genera respuestas
concretas a problemáticas que se plantean
los investigadores y coinvestigadores cuando
deciden abordar una interrogante, temática
de interés o situación problemática y desean
aportar alguna alternativa de cambio o
transformación. (p. 104)
Atendiendo las exégesis anteriores, la
concepción de Vargas (2009) sobre el método
IA evidencia la práctica como objeto de estudio
en misma, objeto de análisis, reexión
e intervención, con responsabilidad ética y
profesional. Así pues, se hace relevante el
desarrollo de procesos que favorezcan un
análisis riguroso de lo que se produce, lo cual,
a su vez, implica la búsqueda bibliográca
con el propósito de extraer de una teoría, los
aspectos aplicables para la situación problema
en una realidad contextual.
En lo que respecta a este trabajo, la IA es
consecuente con los objetivos propuestos,
constituyéndose como el mejor enfoque
para intervenir las prácticas evaluativas del
profesorado, comprendiendo, reexionando y
mejorando la forma de hacer docencia, porque
actúa como una herramienta para generar
transformación, gracias a la exploración
y el diálogo entre los participantes y, en
consecuencia, construir signicados distintos
a los convencionales, fomentando una
transformación paradigmática.
A tal efecto, la elección de un escenario que
sirva de fuente de información y observación en
la IAP, es clave para la aplicación de modelos,
estrategias e instrumentos que, de ser empleados
en la práctica evaluativa, mejorarían la calidad
del quehacer educativo del profesorado. De
ahí que los investigadores acuden a este
método, enfocándose en la medra continua
de las prácticas evaluativas, considerando
los aspectos que las condicionan, así como
el proceso que siguen, para luego proveerles
estrategias y un sistema de seguimiento
que fortalezca, no solo el conocimiento, sino
también la forma de accionar, en un contexto
susceptible a construcción y deconstrucción de
los signicados, así como en la transformación
de los escenarios educativos, partiendo del
análisis de su propia experiencia.
Por ende, las prácticas evaluativas del
profesorado revelan información para
llevar a cabo acciones sistemáticas que
conlleven resolver el problema, formulando
procedimientos consensuados y participativos
a través de la elaboración de un sistema de
seguimiento a las estrategias de evaluación
propuestas. Con este enfoque, se busca que
el docente reconozca el problema y fortalezca
sus prácticas evaluativas, atendiendo las
necesidades reales del presente y resuelva,
además, las futuras eventualidades que
puedan darse en su hacer pedagógico.
Ahora bien, el diseño de la investigación
cualitativa, aun cuando es exible, requiere
una rigurosidad que mantenga una coherencia
con el planteamiento del problema; por ello se
tuvo en cuenta el modelo de Kurt (1946), que
consta de las siguientes etapas: descripción
de la situación problema, construcción de las
bases teóricas, diseño metodológico, trabajo
de campo, análisis e interpretación de los
instrumentos, implementación de la propuesta,
análisis nal, recomendaciones y conclusiones,
todo lo cual se ve representado en la Figura 1.
160
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
Figura 1
Etapas del proceso de investigación
Nota: Tomado del modelo de Kurt (1946).
grado de exactitud y conabilidad; esto va a
depender de las técnicas que se utilice; por
eso, la selección fue no aleatoria y estuvo
basada en el juicio de los investigadores; este
tipo de muestreo permite seleccionar los casos
más pertinentes, con el propósito de obtener
mayor información, para lo cual se tomó los
siguientes criterios de selección:
• Sede de la IE que posea una
infraestructura y una dotación adecuada
para capacitar a los docentes
• Sede de la IE con profesores nombrados
con más de cinco años y que posean estudio
de posgrado, profesores con área
especíca de conocimiento, dispuestos a
participar como muestra de la presente
investigación.
Por otra parte, las estrategias de recolección
de información representan la forma como
los investigadores proceden a recabar
los datos necesarios para dar respuesta
al objetivo de estudio; en este orden,
Así pues, en la investigación se seleccionó, como
unidad de análisis, 48 profesores que hacen parte
de las sedes de la I.E. Ciro Pupo Martínez: Las
Delicias, Alfonso Araujo Cotes, 19 de Marzo y Sede
central, con el propósito de intervenir el plantel
educativo con el análisis de la práctica evaluativa,
de tal modo que se pueda lograr transformar la
realidad que preocupa a los investigadores.
Igualmente, la unidad de trabajo estuvo
directamente relacionada con el contexto
representativo del objeto de estudio; por ello, se
elaboró un muestreo intencional y conveniente,
de modo que se amoldara a los objetivos, al
tipo de investigación y al contexto especíco; en
consecuencia, la unidad de trabajo se delimitó
teniendo en cuenta las características del
profesorado de la sede central, en virtud de que
éstos se encuentran desarrollando su quehacer
pedagógico en los niveles de básica secundaria
y, su preparación subyace en un saber concreto.
En particular, en toda investigación es fundamental
que los hechos y relaciones que se establece
con los resultados obtenidos, tengan el máximo
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
161
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
se consideró herramientas que permiten
recolectar la información de las experiencias
signicativas vividas por el docente, a través
de un diagnóstico inicial, con el propósito de
sistematizar la información relevante que luego
es utilizada en los talleres de reexión, para el
establecimiento de los elementos, estrategias
e implementación del sistema de seguimiento
de las mismas, como consecuencia de la IA
(Galeano, 2014); para ello se hace necesario
tomar en cuenta todas las etapas del proceso
investigativo, los objetivos, categorías y
unidades de análisis vinculadas a las unidades
de trabajo.
Para la recolección de la información, en
todas las fases se utilizó la sistematización.
Según Jara (2003, citado por Antillón, s.f.),
de la buena formulación de las preguntas
iniciales, depende el buen desarrollo de una
sistematización.
[Esta] representa una articulación entre
teoría y práctica, lo cual nos coloca ante el
reto de desarrollar un lenguaje que exprese,
a nivel conceptual, toda la riqueza y la
dinámica presentes en la práctica. […] Una
tarea permanente que facilita y consolida
el carácter sistémico del hacer y del pensar
de una organización, grupo o institución,
contribuyendo fundamentalmente a la
búsqueda y/o rearmación del sentido de su
práctica. (Antillón, s.f., pp. 2-3)
De acuerdo con esto, la sistematización de
la información recolectada en el proceso
de investigación se desarrolló en diferentes
fases; para la construcción de la primera,
se procedió a realizar la búsqueda de
información, estimando trabajos anteriores
con relación directa al tema; además,
considerando referentes teóricos que apoyan
el desarrollo de la investigación, concatenando
con observaciones que facilitan el engranaje
para realizar la entrevista con el propósito de
sistematizar el cuerpo del trabajo de manera
coherente y cuyos resultados permiten abordar
el problema a través de las técnicas del taller
reexivo y cartografía conceptual, recurriendo
a la IA con su respectivo instrumento (diario
de campo) para, nalmente, abordar un
sistema de seguimiento con una lista de cotejo
que conduciría al profesorado de la Unidad
Educativa a llevar un control sobre su práctica
evaluativa, vericar sus avances y corregir los
posibles errores de su carrera, profesional y
asertivamente.
Para la segunda fase, fueron construidos los
antecedentes que reforzaron la construcción
de las bases teóricas; de igual forma, fueron
edicados los referentes legales, contextuales
y éticos de la investigación. En cuanto al
levantamiento de la tercera fase, se realizó el
diseño y aplicación de los instrumentos, a n de
recolectar los datos que aportó el profesorado
de la institución, previamente seleccionado, en
el contexto de secundaria de la sede central.
Siguiendo con este proceso sistemático, en la
cuarta fase se procedió a interpretar y analizar
la información recabada, aplicando la técnica
de triangulación, que permitió elaborar la
propuesta del sistema de seguimiento para
los docentes, lo cual podría fortalecer sus
competencias profesionales. Para la quinta
y última fase se elaboró las conclusiones,
recomendaciones y presentación del trabajo
nal, para socializar a posteriori, los principales
hallazgos y alcances de la investigación.
Bajo esta interpretación, la técnica utilizada
para el primer objetivo estuvo orientada a la
observación participante, constituyéndose como
el primer paso del método y convirtiéndose en
habilidad básica del investigador, que permite
profundizar sobre los aspectos que condicionan
la práctica evaluativa del profesorado en el
contexto real donde interactúan. Al respecto,
Valenzuela y Flores (2014) arman que la
observación participante se desarrolla en un
contexto cualitativo. Hernández et al. (2014),
por su parte, la describen como la oportunidad
que tiene el investigador, de ahondar en
situaciones sociales, donde mantiene un rol
activo y una reexión permanente en lo que
sucede.
Cabe destacar que, para este estudio, la
observación participante tuvo lugar en el
momento mismo en el que los observadores
(investigadores) identicaron las situaciones
que inciden en la gestión de las prácticas
evaluativas del profesorado de la institución,
al involucrarse en las actividades de rutina que
realizan en los entornos virtuales. En efecto,
es una técnica muy conveniente para los
investigadores, por cuanto brinda elementos
162
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
para la comprensión sobre cómo es la práctica
evaluativa, recibiendo datos directos y
descriptivos de los participantes.
En consecuencia, se hizo necesaria la
aplicación de una entrevista semiestructurada
que apoyase las observaciones realizadas por
los investigadores, permitiendo identicar los
aspectos que condicionan la práctica evaluativa
del profesorado. Su nalidad primordial
orienta a indagar sobre las perspectivas de los
participantes, conocer sus creencias, opiniones
y signicados, así como de comprender
sus sentimientos, percepciones, acciones y
motivaciones sobre el tema de la investigación
desde las experiencias propias. Así mismo, es
conveniente para los investigadores, puesto
que brinda la comprensión sobre las categorías
preestablecidas, aspectos que condicionan
la práctica evaluativa, los procesos de la
evaluación y las estrategias evaluativas.
Siguiendo con la sistematización, para el
segundo objetivo se empleó la técnica del taller
reexivo, que permite analizar las situaciones
de manera real; además, potencializa la
construcción de alternativas, cimentando
la reexión-acción en un grupo donde cada
participante tiene la libertad de gestionar su
transformación. Para Aguirre (2000), es una
metodología que apunta a un aprendizaje
consciente y a la búsqueda del saber de
manera continua, lo cual implica la capacidad
del docente para adaptarse a las distintas
situaciones del entorno. A través de su
dinámica, identica los elementos de la práctica
evaluativa, con la oportunidad de compartir un
proceso pedagógico con el equipo de trabajo,
tener una postura integradora sobre el tema y
brindar soluciones, considerando la situación
actual que se presenta en el quehacer docente.
En este sentido, Galeano (2014) asevera que,
mediante los talleres reexivos se construye
metas comunes desde un trabajo colaborativo
que permite al grupo docente ser más eciente
en su labor, integrando las necesidades e
intereses propios, así como de los actores
del proceso. En el caso de esta investigación,
accede a responder qué elementos intervienen
en las prácticas evaluativas del profesorado.
Entre los principios más importantes de esta
técnica se encuentra:
• La relevancia, que integra las
necesidades de un contexto
• El autotélico, que promueve la
motivación desde la misma actividad,
considerando un ambiente de seguridad
emocional
• El productivo, que maneja un
aprendizaje con procesos prácticos
adaptados a la realidad
• El reexivo, orientado a reexionar
sobre las causas y las consecuencias de
las acciones propias de las participantes
• El aprender haciendo, que implica
el trabajo colaborativo y cooperativo;
entre otros.
Consecuentemente, el instrumento que se
utilizó para otorgar mayor veracidad a los
talleres reexivos, fue la bitácora o diario
de campo, que permite a los investigadores
hacer constar aquellos aspectos que
consideran importantes, a n de organizar,
analizar e interpretar la información que se
recoge sobre las observaciones referidas e
identicar qué elementos intervienen en las
prácticas evaluativas, cuyos hallazgos hacen
posible soportar la construcción sistémica de
seguimiento.
Adherido a ello, para el tercer objetivo, la
presentación de la cartografía conceptual,
con representaciones grácas estructuradas
y sistematizadas, permite la reexión de los
informantes, así como de los investigadores
sobre el proceso, facilitando los descubrimientos
de nuevas ideas y constructos sobre el tema
y dando validez a las inferencias obtenidas
al nal de la investigación (Ortega-Carbajal,
2015). Por otro lado, para Tobón et al. (2010),
orienta el análisis de la información mediante
ejes esenciales relacionados con el problema,
tomando como guía la denición de conceptos,
categorización, diferencias, ejemplicación
y articulación que dan identidad a los
participantes. Estos elementos son abordados
con preguntas orientadoras que son adaptadas
al objeto de estudio y al contexto del mismo,
permitiendo el análisis de la información
que, al integrarse con la técnica, generan
un conocimiento holográfico del constructo
estudiado que, en el presente caso, accede
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
163
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
a responder cuáles serían las estrategias
evaluativas de los profesores.
Por otro lado, Bonilla-Castro y Rodríguez (2005)
asumen que la lista de cotejo corresponde a
una serie de características donde se puede
evaluar contenidos, capacidades, habilidades,
conductas, entre otros aspectos. Así, se
considera como un instrumento de observación
y vericación que actuaría como un mecanismo
de revisión y avance para las prácticas
evaluativas durante el proceso de enseñanza
y de aprendizaje. En esta investigación, la lista
de cotejo es propuesta en el cuarto objetivo,
a n de que el profesorado pueda realizar
un seguimiento de sus prácticas evaluativas.
Consecuentemente, es una oportunidad que se
le brinda a la IE Ciro Pupo Martínez, de manera
que puedan lograr intercambiar conocimientos,
experiencias y opiniones sobre las prácticas
evaluativas, el proceso y las estrategias
empleadas, enriqueciendo del mismo modo,
el trabajo cotidiano y propiciando el cambio
del paradigma en la forma como se concibe
y se desarrolla la enseñanza y el aprendizaje
en tiempos de transformación y, por ende,
poder enfrentar los desafíos con seguridad,
exibilidad, calidad, dinamismo y conanza.
3. Resultados
Con respecto a la categoría ‘Aspectos que
condicionan las prácticas evaluativas’, la
actividad planteada evidenció cómo la
activa participación de los docentes aportó
información valiosa que orientó las líneas de
esta investigación, a pesar de las condiciones
de un escenario pandémico que hizo necesario
replantear la estrategia para realizar las
entrevistas mediante las plataformas digitales,
permitiendo llevar a término satisfactorio el
objetivo.
Asimismo, partiendo de un primer encuentro
con los docentes sujetos de estudio, se
desarrolló la observación participante con
miras a describir los aspectos que condicionan
la práctica evaluativa del profesorado en las
sedes de básica secundaria; además, se llevó
a cabo la entrevista semiestructurada para
validar, efectivamente, esos aspectos que
están vinculados y condicionan el quehacer
docente, en una atmósfera de conanza,
empatizando con cada uno de los participantes
que se mantuvieron atentos sobre el tema,
permitiéndoles expresarse de manera
espontánea, logrando receptibilidad y grata
disposición.
En lo que concierne a la categoría ‘Elementos
de las prácticas evaluativas’, se ejecutó el taller
reexivo con los profesores pertenecientes a la
unidad de trabajo, donde la participación se dio
activamente, con disposición y puntualidad.
De esta forma, partiendo del instrumento de
monitoreo, se plasma de manera interpretativa
las distintas intervenciones que se ejecuta
durante la interacción de los investigadores
con los sujetos de estudio, caracterizándose el
encuentro por la postura de los participantes
que, en todo momento estuvo marcada
por la motivación, la colaboración y la
apertura por recibir un nuevo conocimiento;
asimismo, mostraron interés por conocer
más detalladamente, algunos aspectos de la
investigación, especialmente lo relacionado
con la puesta en marcha de las estrategias
evaluativas expuestas.
Cabe destacar que, durante el taller reexivo,
los docentes preguntaron, indagaron y
expresaron sus posturas, referentes a cómo
ejecutan sus labores y cómo consideran deben
ser ejecutadas, manteniéndose abiertos a
conocer otras formas de desarrollar la práctica
evaluativa en ambientes virtuales.
Para la categoría ‘Estrategias evaluativas’,
dando cumplimiento a la actividad programada,
se pautó una presentación dinámica y
participativa que mostró el benecio que ofrece
el uso y aplicación de pruebas escritas, lectura
reexiva, mapas, infografías, diagramas,
talleres o ejercicios, solución de problemas,
simulaciones y juego de roles a través de
la cartografía conceptual. En función de lo
expuesto, se empleó la técnica como una
herramienta efectiva para promover la difusión
de las experiencias vividas por el profesorado
en sus prácticas evaluativas, constatando las
estrategias que aportan positivamente a su
labor.
Como instrumento de monitoreo se utilizó el
diario de campo, donde se deja constancia de los
hallazgos observados, sirviendo de apoyo para
descubrir y anotar los hechos más resaltantes,
164
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
así como extraer las reexiones e información
útil para poder efectuar el respectivo análisis
y triangulación. Las actividades efectuadas
fueron planicadas y orientadas para recolectar
datos que facilitaran la elaboración de un
sistema de seguimiento que está avalado por
una lista de cotejo, permitiéndoles evaluar el
avance en sus funciones como educadores
y actores activos en el funcionamiento del
sistema.
Una vez se expuso todas las estrategias que se
puede emplear de forma presencial y virtual,
algunos de los docentes manifestaron que aun
cuando eran interesantes y muy pertinentes
para generar conocimiento interactivo y
motivación en los estudiantes, la mayoría de
la población estudiantil del colegio como tal,
no cuenta con los recursos tecnológicos para
interactuar a través de una plataforma.
Tabla 1
Triangulación. Categoría: Práctica evaluativa. Subcategoría: Gestión personal
Fundamentos teóricos de
las subcategorías
Respuesta Postura de los
investigadores
Se denen como la
capacidad que tiene el
docente de adaptarse a
las necesidades educativas
y sociales que exige el
entorno, transformándose
a la par con el sistema en
su labor pedagógica; así
mismo, el docente, en su
rol de líder formador y
gestor de los procesos de
enseñanza-aprendizaje,
tiene la responsabilidad de
velar por los factores que
condicionan la institución y
la praxis docente (Castillo y
Rodríguez, 2014).
Las respuestas de los docentes
permiten expresar que hubo
reexión en cuanto a la práctica
evaluativa, indicando que ella
propicia la motivación de los
estudiantes para aprender
recibiendo, leyendo, haciendo,
participando, comprendiendo,
escribiendo, durante el proceso
educativo, coadyuvando al
mejoramiento y crecimiento
de cada uno de los estudiantes
de manera integral, porque se
evalúa varios aspectos como:
cumplimiento, responsabilidad,
organización, autonomía,
participación, talento, atención,
respeto y comunicación.
También los resultados indicaron
que la práctica evaluativa es
un escenario donde se genera
empatía hacia los estudiantes,
para iniciar con una disposición
óptima y así facilitar el proceso
de orientación y evaluación
en los estudiantes, mediante
sus habilidades, destrezas y
aptitudes de forma cualitativa,
estando presente la evaluación
diagnóstica, la heteroevaluación
y la coevaluación, permitiendo
constatar si se está alcanzando
en los estudiantes, los propósitos
planteados en el momento de
elaborar la planeación.
El docente se apoya en
los conocimientos que
posee para llevar a cabo
su práctica evaluativa
virtualmente. Durante el
escenario pandémico, se hizo
uso del celular, mensajes
de texto, mensajes de voz,
videollamadas, mensajes por
WhatsApp para ejecutar las
evaluaciones; sin embargo,
evidencian ausencia de
conocimiento tecnológico que
refuerce con ecacia la práctica
evaluativa en espacios 100 %
virtuales, lo cual genera un
desaprovechamiento de las
estrategias que impulsan el
rendimiento del estudiante,
estimulan su actitud y se
traducen en resultados
positivos para el sistema
educativo.
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
165
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
Tabla 2
Triangulación. Categoría: Práctica evaluativa. Subcategoría: Gestión del conocimiento
Fundamentos teóricos de
las subcategorías Respuestas Postura de los
investigadores
Johnson et al., (1994)
señalan que los procesos
de la gestión educativa
son transversales y
favorecen el desarrollo
integral del individuo,
validando que las grandes
ideas toman su tiempo
para madurar y crecer, lo
cual invita al profesorado
a producir modos de
cooperación, colaboración,
reconocimiento y
retroalimentación, que
impulsen la generación de
una perspectiva colectiva
coherente con los procesos
de innovación que vivimos.
La adaptación a los cambios
ha proporcionado la capacidad
de investigar sobre las
herramientas tecnológicas;
para las evaluaciones se utilizó
plataformas como Kahhot,
Quizizz, evaluaciones en línea
ubicadas en sitios web. Los
estudiantes que no podían
realizarlas en línea, la recibían por
medio de WhatsApp; por ello, las
herramientas tecnológicas en este
momento desempeñan un papel
muy importante, pues a través
de ellas se hace todo el proceso,
incluyendo la práctica evaluativa,
intentando hacer lo mejor posible.
Para las evaluaciones se utilizó
programas en el computador que
permitieron realizar pruebas en
línea; se utilizó el WhatsApp en el
celular para recibir audios sobre
conceptos relacionados con los
temas vistos.
Otro aspecto resaltante es que los
docentes no han recibido asesorías
para utilizar las herramientas
tecnológicas, aspecto que ha
frenado los procesos de formación
y evaluación, pero se sigue
luchando para seguir adelante
en este proceso de cambio en la
enseñanza-aprendizaje
Dentro de los obstáculos que
han tenido que enfrentar los
docentes para desarrollar su
práctica evaluativa, el principal
recae sobre la nula formación
en materia de estrategias
de evaluación mediante
herramientas virtuales; por una
parte, porque anteriormente
no les era imprescindible; por
otra, porque no la han recibido
de manos de las autoridades
que dirigen el sistema
educativo. A pesar de ello, se
han vuelto autodidactas, han
investigado y están abiertos
al aprendizaje, apoyándose en
aplicaciones fáciles y prácticas
que han aportado efectiva y
signicativamente a su labor.
4. Discusión
En atención a las características del tipo de
investigación, autores como García (2014)
plantean que, por medio del método del
análisis, se comprende la naturaleza y el
contexto que dirige el comportamiento
social de los sujetos de estudio; es decir,
las investigaciones cualitativas requieren un
proceso interactivo donde participan el sujeto
que investiga y el participante, dentro de un
contexto que permite ver la realidad de forma
objetiva y, reconstruirla.
En este sentido, la investigación presenta un
corte social que implica indagar acerca de las
diferentes situaciones que son interpretadas
por la observación de un ser humano; en
consecuencia, se explora integralmente el
contexto, se describe y se comprende en
función de los conocimientos y vivencias
de los actores del proceso y no con base en
suposiciones (Sánchez et al., 2004).
En cuanto a los aspectos que condicionan la
práctica evaluativa y las acciones pedagógicas
que un profesor ejecuta dentro de un salón de
clase para obtener información sobre el proceso
166
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
de enseñanza y de aprendizaje, se observa
una relación directa con su experiencia,
conocimiento, así como con el desarrollo de
sus habilidades y destrezas puestas a favor del
aprendizaje de los estudiantes. Para Villada
(2002), las prácticas evaluativas representan
la acción docente, al ser capaz de responder a
las exigencias de un sistema educativo nacional
e institucional, generando la construcción de
estrategias, procedimientos, fundamentos
y categorías que le permiten realizar una
evaluación con características de calidad y jar
sus puntos de vista para, nalmente, fortalecer
un aprendizaje.
En función de lo anterior, mediante la observación
realizada y los datos recolectados a través de
la entrevista, se puede validar la pregunta:
¿Cómo son los aspectos que condicionan la
práctica evaluativa del profesorado en los
niveles de básica secundaria en las sedes de
la Institución Educativa Ciro Pupo Martínez
del municipio de la Paz, Cesar? Asimismo, los
datos recolectados a través de la aplicación
de la entrevista permiten determinar que,
evidentemente, los docentes reconocen el
valor de la innovación, la importancia de
abrirse a nuevos conocimientos, así como de
reestructurar la forma de enseñar y evaluar,
de cara a escenarios virtuales; sin embargo,
se constata la existencia de realidades
innegables como el contexto donde se
desarrolla la virtualidad que, en el caso de
los estudiantes, en reiteradas ocasiones,
imposibilita aplicar herramientas, recurriendo
al uso de la tecnología.
Complementando la información, las
respuestas orientan el resultado hacia la
ausencia de capacitaciones de los ocho
sujetos en estudio, sobre el uso y aplicación
de las distintas plataformas tecnológicas para
efectuar su práctica evaluativa de manera
eciente, productiva y signicativa. Cuando
se les propuso el sistema de seguimiento e
innovadoras estrategias evaluativas, expresaron
que, a pesar de no poseer el conocimiento
necesario para aplicarlas ecientemente ni
los recursos para formarse, reconocen la
necesidad de apropiarlas; y, si bien ven poco
factible su aplicación, como consecuencia
de la baja conectividad de los estudiantes,
se mantuvieron atentos y receptivos a la
capacitación. De igual forma, se determina
que la realidad actual donde se desenvuelve
el profesorado les exige que sus prácticas
evaluativas emigren a un entorno virtual y
contemplen, dentro de este nuevo escenario,
el contexto interactivo de los estudiantes,
como sujetos activos en la constitución de
nuevas experiencias, ubicando el proceso de
adecuación por encima del resultado nal y, la
práctica, sobre lo conceptual, en coherencia a
sus necesidades y las del entorno.
Lo anterior se puede validar en la triangulación
que visualiza cómo los docentes expresan que
buscan hacer lo que pueden en estos tiempos
de pandemia, manifestando su satisfacción
porque, a pesar de no haber previsto este
abrupto cambio en la forma de evaluar y de
no contar con experiencia tecnológica, logran
alcanzar y culminar un año escolar con muchos
inconvenientes, pero con la satisfacción
de haber podido llegar a la mayoría de los
estudiantes con llamadas telefónicas, mensajes
en WhatsApp y otras herramientas que poseen
a la mano, y se adaptan a las circunstancias
vividas.
Este panorama se aanza en la postura de
Vargas (2014), quien dene la práctica
evaluativa como aquellas actividades que
cumple el docente desde la construcción
de sus propias ideas cimentadas por su
experiencia y su conocimiento, enmarcadas
en un modelo pedagógico, en disposiciones
legales y en la capacidad de adaptación para
responder a las exigencias del sistema. Visto
desde esta postura, la práctica evaluativa se
convierte en un proceso exible que implica
valorar el aprendizaje tanto del estudiante
como del profesorado, dado que son parte del
mismo sistema.
Según esto, el aprendizaje en estos momentos
es compartido, donde tanto el docente como
el estudiante se ven obligados a re-encuadrar
la forma tradicional de efectuar la evaluación
e introducir aplicaciones, herramientas
y recursos que sirvan de apoyo en este
proceso. De ahí que, desde la postura de los
investigadores, es necesario que los docentes
de básica secundaria de las sedes de la IE
Ciro Pupo Martínez, además de hacer uso del
conocimiento dado por su experiencia en un
escenario marcado por la suspensión presencial
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
167
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
de las actividades académicas y migración a un
entorno radicalmente virtual, busquen apoyo
en las herramientas que tienen a su alcance,
como el computador o el celular, con mensajes
de texto o de voz, videollamadas, utilización
de formularios Google, sitios web, aplicación
Quizizz, Educaplay y Kahoot, para ejecutar las
evaluaciones.
Sin embargo, se evidencia la ausencia de
conocimiento tecnológico que refuerce
con ecacia la práctica evaluativa en
espacios virtuales, lo cual genera un
desaprovechamiento de estrategias que
impulsen el rendimiento del estudiante,
estimulen su actitud y sean traducidas
en resultados positivos para el sistema
educativo. Asimismo, los docentes
reconocen que las condiciones actuales les
llevan a propiciar una gestión de la práctica
evaluativa, tomando en cuenta un factor
preponderante, como lo es, el contexto de
los estudiantes, en vista de que los mismos,
en algunas oportunidades, carecen del
acceso a internet y otros no cuentan con los
recursos para equiparse de herramientas
como computadores o teléfonos inteligentes,
por mencionar algunos aspectos, situación
que les obliga a replantearse las estrategias
mencionadas y contemplar las condiciones
personales y sociales del estudiante,
buscando con ello, mantener activa su
participación, su motivación y compromiso
con el proceso educativo.
Considerando las apreciaciones anteriores, esta
etapa de transformación acelerada que viven
las IE, donde los espacios de básica secundaria
están ocupados por jóvenes centennials
(centenarios) cobijados por el mundo de la
virtualidad y con una natural inclinación hacia
los avances tecnológicos, requiere docentes
comprometidos con el cambio, bajo una práctica
evaluativa innovadora que valore los errores
y el contexto del estudiante, favoreciendo
un aprendizaje signicativo, de tal manera
que se cultive la motivación, con resultados
satisfactorios que soslayen las percepciones
erróneas existentes y puedan orientar el
proceso hacia los objetivos propuestos.
Las prácticas evaluativas constituyen
actividades conjuntas, dinámicas y reexivas
que son realizadas a través de las interacciones
pedagógicas, las cuales están precedidas por
la experiencia, el conocimiento y los atributos
de los actores, que ocurren en la conectividad
del salón de clase, antes, durante y después
de cada actividad ejecutada (Zabala, 2000).
García (2014) complementa esta postura e
indica que el proceso relacional del docente debe
responder a un marco curricular; sin embargo,
está precedido por elementos condicionantes
como creencias, conocimientos y el sentido de
la evaluación, que se observa en la práctica e
incide directamente en el aprendizaje de los
estudiantes.
El objetivo en estudio en esta categoría se
alcanza con la estrategia de recolección de
información denominada ‘Taller reexivo’,
llevada a cabo a través de la plataforma Google
Meet, la cual permite nutrir la investigación
con experiencias signicativas vividas por los
docentes durante el proceso, e identicar los
elementos que intervienen en sus prácticas
evaluativas, plasmando los resultados en un
diario de campo que posteriormente se emplea
para la respectiva triangulación.
En términos generales, los resultados plasmados
en la bitácora, sirven a los investigadores para
recabar información sobre aquellos puntos,
actitudes, comportamientos, expresiones y
posturas que permiten organizar, analizar
e interpretar la información, para construir
metas comunes desde un trabajo colaborativo
que facilita a los sujetos en estudio, ser más
ecientes en su quehacer pedagógico. Estos
resultados reejan que el docente, dentro de
su práctica evaluativa, ciertamente le otorga
sentido a su desempeño, enmarcado en su
conocimiento y sus creencias, las cuales se
sostienen sobre la interpretación que éste les
otorga a las situaciones que se presentan en
la cotidianidad, deniendo categóricamente la
efectividad en su gestión pedagógica.
En contexto, la interconexión de los elementos,
creencias, conocimiento y sentido de la
evaluación que establece el docente con sus
prácticas, determina el rendimiento de los
estudiantes, donde su responsabilidad como
líder exige la gestión de los mismos para
otorgarle un signicado a su labor, en coherencia
con el diseño curricular de la institución.
168
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
A grandes rasgos, se observa que los docentes
están conscientes de que las creencias rígidas
sobre cómo enseñar hoy en día dejan de
aportar valor al proceso de aprendizaje;
de ahí la necesidad de transcender las
estructuras pre-existentes en su práctica
evaluativa, exibilizarse y amoldarse a la
exigencia del contexto actual, existiendo casos
donde expresan que, en algunas ocasiones,
desconocen cómo evaluar a cada grupo de
estudiantes, comprendiendo incluso que, en un
mismo salón, se los debe evaluar de manera
diferente, dependiendo de sus necesidades.
Adicional a ello, reconocen que, mantenerse y
aferrarse a la manera tradicional de evaluar,
escrita y valorada solo la parte teórica, más
que aportar a la formación, limita la forma
de conectar con ellos y el desarrollo de sus
habilidades, para que sean partícipes de un
proceso evaluativo eciente.
Lo expuesto conrma que, los tiempos actuales,
marcados por una constante transformación,
invitan al docente a reevaluar sus creencias,
reforzar el conocimiento y revisar el sentido que
le otorgan a su práctica evaluativa, haciendo
imprescindible plantearse la construcción
de nuevos constructos que se vuelquen en
estrategias que faciliten el fortalecimiento
de las destrezas, aanzando su quehacer
pedagógico, situación que repercute en toda
la comunidad educativa y en los espacios
sociales del entorno donde se desenvuelve.
Por ello, es esencial contextualizar el proceso
evaluativo, identicando los elementos claves
que intervienen en la práctica evaluativa
para construir estrategias coherentes con
el diseño curricular, alineadas a los valores
y procedimientos de la institución y que,
adicionalmente, contemplen las condiciones
del estudiante, integrándolo como actor
preponderante del proceso educativo.
Las estrategias de evaluación están
inuenciadas por los aspectos que condicionan
la práctica evaluativa y permiten denir los
métodos, las técnicas y los recursos que son
utilizados en la valoración del aprendizaje de
los estudiantes (Díaz y Hernández, 2007). En
este sentido, los investigadores reconocen
que un gran número de estrategias educativas
están estructuradas en función de las prácticas
evaluativas, buscando avivar el interés en
los estudiantes, a pesar de las creencias y el
contexto donde se desenvuelve el docente; en
algunos casos, dejan de lado la motivación,
enfocándose solo en la reproducción y el
control de los conocimientos; de ahí que la
invitación esté dirigida a trabajar desde el
constructivismo y rescatar la autenticidad,
conectando con sus estudiantes y reexionando
en función de construir espacios signicativos
que se traduzcan en la resolución de problemas
reales.
Estos procedimientos pueden ser empleados
por los docentes para promover cambios y
transformaciones en el proceso de evaluación
de manera efectiva, acorde a los requerimientos
del sistema (Tenutto, 2006). Dicho esto,
para efectos del tercer objetivo, enfocado
en establecer las estrategias en las prácticas
evaluativas para el profesorado, se observó el
comportamiento de los participantes, mediante
el desarrollo de la cartografía conceptual
llevada a cabo en el taller reexivo, empleando
la plataforma Google Meet y respondiendo a la
pregunta que permite establecer cuáles serían
las estrategias en las prácticas evaluativas.
En este particular se evidencia que el
profesorado, de una u otra forma, se ve
obligado a hacer uso, mayoritariamente, de
instrumentos y estrategias de evaluación
tradicional, construyendo guías de aprendizaje
en casa para que los representantes de los
estudiantes las retiren personalmente en las
instalaciones de la institución y que, de esta
manera, puedan presentar sus actividades. No
obstante, maniestan que seguirán empleando
algunos recursos que durante la transición han
dado resultado, como es el caso del WhatsApp,
los mensajes de texto, las videollamadas, los
correos electrónicos y las reuniones en Zoom
o Meet.
Por tanto, cuando el docente emplea
estrategias evaluativas innovadoras y de forma
acertada, guía el proceso conjuntamente
con sus estudiantes, hacia una ventana de
nuevas experiencias que los conduce hacia la
adquisición de conocimientos signicativos,
robusteciendo sus competencias blandas. Sin
embargo, para poder aplicar dichas estrategias,
es imperante que las condiciones mininas
necesarias existan; es decir, se requiere
conectividad y equipamiento para ejecutarlas.
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
169
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
Teniendo clara la apreciación anterior, bajo
la percepción de los investigadores, se hace
necesario utilizar estrategias de evaluación
orientadas al empleo de técnicas e instrumentos
que contemplen la realidad del entorno social
de los actores del proceso educativo, sentando
las bases para desarrollar integralmente sus
competencias, actitudes, aptitudes y valores
de manera equilibrada, traduciéndolas en
resultados óptimos y efectivos. Por otro lado,
el MEN (2006) señala que las estrategias de
evaluación requieren estar sustentadas en un
método capaz de vericar todo el proceso de
enseñanza-aprendizaje, en función de acciones
coherentes con el objetivo determinado en las
planicaciones y con acciones tendentes a su
consecución.
Se resalta, en este sentido, la disposición
de los profesores, quienes indican que estas
estrategias de evaluación se relacionan, desde
su punto de vista, con el aprender haciendo,
siendo partícipes de actividades que promueven
la interacción del estudiante, permitiéndoles
poner en práctica lo aprendido e incentivándoles
hacia la ejecución de experimentos sencillos
en casa, que no impliquen el uso de elementos
tecnológicamente complejos, a n de
motivarlos a pensar y cuestionar lo establecido,
favoreciendo la creatividad al emplear los
recursos disponibles y, potenciar su formación.
Por consiguiente, lo descrito permite validar
cómo las prácticas evaluativas del profesorado
arrojan información contundente que marca
la ruta de acción más eciente para poder
resolver el problema planteado en esta
investigación. Igualmente, la elaboración de un
sistema de monitoreo, vendría a constituirse
como un elemento diferenciador que funge de
termómetro para que el profesorado pueda
reconocer las dicultades y anar su labor,
sintonizando con los actores principales del
proceso; es decir, los estudiantes.
Cabe señalar que, en efecto, el entorno
donde se desempeña el profesorado de la
institución en estudio está marcado por
cambios acelerados, así como por el avance
de la ciencia y la tecnología, sobre todo,
caracterizado por la emergencia sanitaria
producto del virus COVID-19, realidad que
les exige optimizar sus competencias en el
mismo sentido y ritmo del proceso evolutivo;
esto es, requieren de un sistema que sea
capaz de fungir como apoyo para lograr un
proceso óptimo de sus prácticas, midiendo
sus avances y trabajando ordenadamente, a
n de superar los obstáculos que se presente
en el camino. Como señala CARE (2004), el
sistema de seguimiento viene a constituirse
en una forma organizada que le facilita al
profesorado, poder evaluar con objetividad el
alcance de su práctica evaluativa, así como el
desplazamiento que logre obtener posterior a
subsanar los obstáculos que el mismo proceso
le presente, en función de alcanzar una visión
clara del contexto y estructurar, tanto las
estrategias como las acciones, en coherencia
con los requerimientos propios del sistema.
A n de llevar a término el proceso, se elabora
la propuesta del sistema de seguimiento a
través de la puesta en marcha de un espacio
de retroalimentación denominado ‘Círculos de
acción docente’, que busca generar posibilidades
mediante la cooperación, para construir
estrategias que logren encausar las acciones
en forma signicativa y superar los desafíos del
sistema educativo (Contreras y Chacín, 1997).
Estos círculos de acción docente buscan brindar
al profesorado, la posibilidad de establecer
conexiones signicativas con las innovaciones
de las estrategias o, en su defecto, hacer uso
eciente de las consideradas por ellos en los
entornos virtuales, atendiendo las exigencias
requeridas en el campo profesional. De igual
forma, facilitar que los sujetos en estudio
estén en capacidad de modicar en forma
regular su observación de los hechos, a favor
de efectuar las modicaciones que su gestión
requiera y, poder dar cumplimiento al reto que
han asumido como pilares fundamentales del
proceso educativo, en un tiempo revestido por
cambios profundos y trascendentales.
La metodología que se plantea para efectuar
los círculos de acción docente inicia con el
reconocimiento del problema, a n de tener
una idea clara del fenómeno que se aborda,
identicando, posteriormente, el objetivo que
se pretende alcanzar, con sus respectivas
acciones, para ir validando, mediante revisiones
constantes y periódicas lo que se hizo, lo que se
está haciendo y lo que se va a hacer; así, todos los
miembros del equipo pueden tener la misma
información. En consecuencia, bajo la postura
170
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
de los investigadores, es necesario que los
equipos de trabajo planiquen los encuentros
con tiempos cortos participativos, para que
cada integrante pueda socializar de forma
concreta los hallazgos más signicativos de las
actividades llevadas a cabo en el mes anterior,
aquellas que están ejecutando en el momento
y las que están pendientes por realizar, así
como los requerimientos especiales que
precisan para aligerar el proceso y solventar
los obstáculos que impiden el logro de los
objetivos.
Adicional a las reuniones mensuales que
sirven para visualizar dónde estaban, dónde
están y hacia dónde irán, se requiere que,
dentro de ese periodo mantengan actualizada
la planicación de sus estrategias, con el
objetivo de abordar, desde el enfoque de
la innovación y la creatividad, las acciones
planicadas. Otro de los benecios de esta
técnica lo constituye el hecho de que cada
docente puede lograr la documentación de
sus avances, compartiéndolos con sus pares,
exponiendo en forma abierta y con conanza
sus dudas o sugerencias, a n de optimizar los
recursos y el logro de los objetivos, brindando
la oportunidad de reconocerse como parte del
sistema y permitiendo, a su vez, fortalecer la
calidad de sus propios procesos de aprendizaje
al mantener en alto la motivación, invitando
al profesorado a ocupar su lugar como
generadores de espacios de reexión y de
formación dentro del sistema educacional.
Para tal efecto, los investigadores proponen
optimizar la práctica evaluativa mediante
el uso de tres herramientas denominadas:
‘Planilla de trabajo’, ‘Tablero de coordinación de
acciones’ y ‘Lista de cotejo’, las cuales reejan,
por un lado, los objetivos medibles, realizables
y especícos que planteen y, por otro, las
estrategias con sus acciones respectivas que
indican cómo alcanzarlos, las cuales serán
monitoreadas con indicadores que faciliten
tener un punto de referencia del nivel de
cumplimiento de las mismas.
De acuerdo con lo descrito se espera que,
cuando el profesorado logre visualizar sus
objetivos mediante el uso de esta herramienta,
le sea más fácil flexibilizar sus acciones y estrategias,
adaptándose a las condiciones del entorno,
teniendo la posibilidad de introducir nuevos
conocimientos, deshaciéndose de estructuras
rígidas y obsoletas; lo ideal es que propicien
elevar el nivel de su función, reconociendo
adicionalmente, la colaboración, como un
elemento necesario para incrementar la
conanza y la motivación de sus estudiantes,
así como las de sus propios compañeros,
identicando sus competencias, puestas al
servicio del sistema educativo.
Estos retos denotan la relevancia de
transformar la forma de llevar a cabo las
prácticas evaluativas de manera ágil y, sobre
todo, enmarcándola en una cultura sustentada
en la apertura, creatividad, innovación,
cooperación, colaboración, conanza, respeto,
comunicación y transparencia, entre otros
valores, que faciliten la entrega de un producto
de calidad, generando valor al estudiante y
produciendo satisfacción en la institución. En
consecuencia, si los docentes se comprometen,
responsablemente, a llevar un sistema de
seguimiento, se puede hacer evidentes mejoras
en sus prácticas evaluativas, con el valor
agregado de permitir visualizar la dinámica de
trabajo ajustada a cada grupo.
5. Conclusiones
Para validar el primer objetivo especíco se
evidencia que, el profesorado logra adaptarse
a las condiciones sociales, caracterizadas por
una coyuntura de emergencia sanitaria que
obliga a recurrir a escenarios virtuales para
poder ejecutar sus labores y, por el contexto
social y personal de los actores del proceso.
En este sentido, la triangulación de la
información demuestra que esta realidad
demanda de ellos el uso de herramientas
tecnológicas no empleadas antes, para
ejecutar las evaluaciones; se observa el
desaprovechamiento de dichas estrategias, al
ver una ausencia signicativa de conocimientos
que refuercen con ecacia su práctica evaluativa
en espacios virtuales.
En cuanto al segundo objetivo especíco,
los resultados obtenidos y descritos en
el diario de campo permiten concluir que
los docentes reconocen y están abiertos a
introducir estrategias innovadoras en su
forma de evaluar; sin embargo, no poseen el
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
171
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
conocimiento suciente para materializarlas.
Adicional a ello, se logra apreciar que, además
del conocimiento pedagógico, ellos están
en la obligación de mantener motivados e
interesados a sus estudiantes, validando
de este modo, la necesidad de robustecer
su formación con elementos de innovación
tecnológica que apoyen su práctica, impulsen
el rendimiento del estudiante, estimulen su
actitud y se traduzcan en resultados positivos
para el sistema educativo.
En la misma línea, con el tercer objetivo
especíco se puede observar cómo los
docentes denotan interés por emplear nuevas
estrategias evaluativas que estén enfocadas
hacia lo actitudinal y motiven al estudiante en
los logros de los objetivos deseados, como lo
muestran los resultados del taller reexivo,
que permiten inferir que, aplicaciones como
el Kahoot y C-map tools son usadas con
frecuencia. No obstante, la mayoría de ellos
expresa la ingente limitante que representa
el tema de la conectividad de los estudiantes,
razón por la cual tienen que replantear la forma
de poder llegar con facilidad a ellos, para dar
cumplimiento a la planicación del proceso
educativo.
De ahí que, con el cuarto objetivo especíco, se
concluye que existe la necesidad de introducir
herramientas que faciliten al profesorado
monitorear el nivel de su práctica y le permitan
visualizar las mejoras que requiere, haciendo
uso de las estrategias que, tanto el contexto
como la realidad social del estudiante, le
permitan.
Para concluir, en lo referente al objetivo
general, argumentado en el acopio teórico
que sustenta esta investigación y cotejado con
los descubrimientos producto de la aplicación
de los distintos instrumentos, se puede
armar que el profesorado es consciente de
su papel como sujeto educador y del llamado
a ser partícipes de la transformación de los
escenarios educativos mediante la adopción
de herramientas innovadoras, creativas y
motivadoras del conocimiento. No obstante,
el mismo sistema donde desenvuelve su
actividad, limita su accionar, presionándole a
adecuarse a las dicultades y a la realidad de
los involucrados, adquiriendo y recurriendo
a formas creativas derivadas de métodos
tradicionales para evaluar, de manera que
puedan alcanzar los resultados esperados,
apoyados en los círculos de acción docente,
como una estrategia que los comprometa
responsablemente a adoptar una metodología
que garantice optimizar su práctica pedagógica
y los integre como equipo.
6. Recomendaciones
Respecto al primer objetivo, se sugiere un
programa de capacitación para el profesorado,
orientado al desarrollo de sus destrezas
personales, de conocimiento e innovación, en
función de que puedan gestionar su quehacer
pedagógico de manera efectiva y con calidad,
coadyuvando al aprendizaje signicativo de
los estudiantes. En caso de no contar con el
respaldo de la institución, se les recomienda
formarse de manera independiente, a n de
enriquecer su labor como docentes.
En cuanto al segundo objetivo, la recomendación
está dirigida a ser conscientes de que, en las
prácticas evaluativas, las antiguas formas
de trabajar poco satisfacen las necesidades
requeridas en la actualidad; por consiguiente,
se debe integrar en el saber pedagógico,
las características del contexto donde se
desenvuelve la actividad, así como el contexto
del estudiante, de suerte que conecten los
intereses comunes para lograr los objetivos
propuestos.
Con relación al tercer objetivo, es necesario
que el docente integre, dentro de sus prácticas
evaluativas, herramientas tecnológicas que le
permitan facilitar su proceso de enseñanza y de
aprendizaje del estudiante, teniendo en cuenta
la realidad social y, en caso de presentarse la
limitante de la conectividad, emplear el correo
electrónico u otro medio de comunicación
para hacer llegar las guías contentivas del
material a evaluar, además de su reproducción
en físico, a n de facilitar la construcción del
conocimiento a los estudiantes que no cuenten
con condiciones de conectividad o recursos
tecnológicos.
Concerniente al cuarto objetivo, se recomienda
la implementación de los círculos de acción
docente, como una herramienta que permite
reexionar sobre las acciones pedagógicas
172
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
que conducirían a mejorar los procesos de la institución, así como los que están orientados a la
práctica evaluativa, los cuales podrán ser llevados a cabo en equipo, con el apoyo de los formatos
denominados: ‘Planilla de trabajo’, ‘Tablero de coordinación de acciones’ y ‘Lista de cotejo’, que hacen
posible llevar sus registros, vericando los avances y logros, de modo que construya actividades
cónsonas a la planicación, con el n de facilitar el seguimiento de su trabajo.
Para nalizar, con el objetivo general, la recomendación está dirigida a que los docentes mantengan
la motivación y el interés por mejorar cada día su práctica evaluativa, atreviéndose a incorporar
nuevas estructuras de diseño, compatibles con las condiciones del entorno y las necesidades de
los estudiantes. Adicionalmente, se sugiere que apoyen su labor en los círculos de acción docente,
pues permiten visualizar indicadores claves soportados en acciones concretas, con factibilidad de
medición, que conducen a potenciar signicativamente su labor.
7. Conicto de intereses
Los autores de este artículo declaran no tener ningún tipo de conicto de intereses sobre el trabajo
presentado.
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
173 Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
Referencias
Aguirre, R. (2000). Dicultades de aprendizaje de la lectura y la escritura. Revista Educere, 4(11),
147-150.
Antillón, R. (s.f.). La Sistematización: ¿Qué es?… ¿Y cómo se hace? Una propuesta de capacitación.
http://www.ts.ucr.ac.cr/binarios/pela/pl-000455.pdf
Bonilla-Castro, E. y Rodríguez, P. (2005). Más allá del dilema de los métodos: la investigación en
Ciencias Sociales (3.ª ed.). Universidad de Los Andes y Grupo Editorial Norma.
Camilloni de, A., Celman, S., Litwin, E. y Palou, M.C. (1998). La evaluación de los aprendizajes en
el debate didáctico contemporáneo. Editorial Paidós.
CARE. (2004). Guía para el Diseño, Monitoreo y Evaluación. https://es.scribd.com/documen
t/453140665/01GuiaDisenoMonitoreoEvaluacion-pdf
Castillo, M.C. y Rodríguez, C. (2014). Las prácticas evaluativas de los docentes del colegio Nuestra
Señora del Rosario de Chocontá [Tesis de Maestría, Universidad Santo Tomás]. https://repository.
usta.edu.co/bitstream/handle/11634/3052/Castillomaria2014.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Colmenares, A.M. (2012). Investigación acción participativa: una metodología integradora de la
acción y el conocimiento. Voces y Silencios, Revista Latinoamericana de Educación, 3(1), 102-
115.
Contreras, O. de y Chacín, S.L. (1997). Material de apoyo sobre Círculos de Acción Docente.
CENAMEC.
Decreto 1290. (2009). Ministerio de Educación Nacional (MEN). https://www.mineducacion.gov.
co/1621/articles-187765_archivo_pdf_decreto_1290.pdf
Díaz, F. y Hernández, G. (2007). Estrategias docentes para un aprendizaje signicativo (2.a ed.).
McGraw-Hill.
Galeano, M. (2014). Diseño de proyectos en la investigación cualitativa. Universidad Eat.
García, L.M. (2014). Evaluación formativa de los aprendizajes en el contexto universitario:
resistencias y paradojas del profesorado. Educación XX1, 17(2), 35-55.
Guerra, L.M. (2018). Prácticas evaluativas para el fortalecimiento del desempeño académico
estudiantil y calidad educativa [Tesis de Maestría, Universidad de la Costa]. https://repositorio.
cuc.edu.co/handle/11323/2927?show=full
Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, P. (2014). Metodología de la Investigación (6.a ed.).
McGraw-Hill / Interamericana Editores, S.A. de C.V.
Johnson, D.W., Johnson, R.T. y Holubec, E.J. (1994). El aprendizaje cooperativo en el aula (G.Vitale,
Trad.). Association for Supervision and Curriculum Development.
Kurt, L. (1946). Acción-investigación y problemas de las minorías. Editorial Graó.
Ley 115 de 1994. (1994, 8 de febrero). Congreso de la República de Colombia. https://www.
mineducacion.gov.co/1621/articles-85906_archivo_pdf.pdf
Ministerio de Educación Nacional (MEN). (2006). Estándares Básicos de Competencias en Lenguaje,
Matemáticas, Ciencias y Ciudadanas. Ministerio de Educación Nacional.
Ortega-Carbajal, M.F., Hernández-Mosqueda, J.S. y Tobón-Tobón, S. (2015). Impacto de la
cartografía conceptual como estrategia de gestión del conocimiento. Ra Ximhai, 11(4), 171-
180.
174
Prácticas educativas del profesorado en los niveles de básica secundaria de las sedes de la institución educativa Ciro Pupo Martinez, La Paz- Cesar- Colombia
Sugeire Licet Cabana Granadas
Héctor Heiler camargo Hernández
Maria de las Mercedes Colina Chacin
Padilla, J.E., Jaimes, N.M., Pacheco, N.M. y Velásquez, D.L. (2009). Prácticas evaluativas desde un enfoque
pedagógico sociocrítico e intercultural en el ciclo complementario de la escuela normal superior María
Inmaculada de Manaure, Cesar. Educación y Desarrollo, 3(1), 9-20. https://doi.org/10.18359/reds.858
Perero-Alonzo, V.E. y Marcillo-García, C.E. (2020). Prácticas evaluativas renovadas para mejorar
la calidad de aprendizaje de los estudiantes. Polo del Conocimiento, 5(7), 1-24.
Pimienta, J. (2008). Constructivismo: estrategias para aprender a aprender (3.a ed.). Pearson.
Pizarro, E.A. y Gómez, S.S. (2018). Concepciones docentes sobre evaluación: de los lineamientos,
el discurso y la práctica. Universidad pedagógica y tecnológica de Colombia. Praxis & Saber,
Revista de Investigación y Pedagogía, 71-88.
Rodríguez, C., Imbernon, F., Sacristán, J.G. y Díez, E.J. (2017). Una nueva ley para un nuevo
modelo educativo. Cuadernos de Pedagogía, (479), 1-4.
Sánchez, G., Ruiz, A., Betancourt, D., Jiménez, A., Ávila, R, y Atehortúa, A.L. (2004). La práctica
investigativa en ciencias sociales. UPN, Universidad Pedagógica Nacional.
Tenutto, M. (2006). Escuela para Maestros: Enciclopedia de Pedagogía Práctica. Círculo Latino
Austral S.A.
Tobón, S., Pimienta, J.H. y García, J.A. (2010). Secuencias didácticas: aprendizaje y evaluación de
competencias. Pearson Educación.
Valenzuela, J.R. y Flores, M. (2014). Fundamentos de investigación educativa. Volumen 1. Editorial
Digital, Tecnológico de Monterrey.
Vargas, E. (2014). Prácticas evaluativas en la educación básica primaria en el Municipio de
Pereira. Centro de estudios avanzados en niñez y juventud [Tesis Doctoral, Centro de Estudios
Avanzados en Niñez y Juventud, CINDE]. http://biblioteca.clacso.edu.ar/Colombia/alianza-
cinde-umz/20160518045859/EdilmaVargas.pdf
Vargas, Z.R. (2009). La investigación aplicada: una forma de conocer las realidades con evidencia
cientíca. Revista Educación, 33(1), 155-165.
Villada, D. (2002). Evaluación pedagógica. Propuesta incorporada a los procesos educativos.
Documento Inédito. Escrito exclusivamente para los docentes del Colegio del Rosario.
Zabala, A. (2000). La práctica educativa. Cómo enseñar (S. Esquerdo, Trad.) (7.a ed.). Editorial
Graó, de Serveis Pedagógics.
Contribución:
Sugeire Licet Cabana Granados: Elaboró la introducción, la metodología, los resultados, la
discusión, conclusiones, recomendaciones y las referencias bibliográcas
Héctor Heiler Camargo Hernández: Elaboró la introducción, la metodología, los resultados, la
discusión, conclusiones, recomendaciones y las referencias bibliográcas.
María de las Mercedes Colina Chacín: Revisó la introducción, la metodología, los resultados, la
discusión, conclusiones, recomendaciones y las referencias bibliográcas.
Los autores participaron en la elaboración del manuscrito, lo leyeron y aprobaron.