Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica35RESUMENABSTRACTISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019. Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica*Johnny Danilo Luna Martínez** Carolina Rodríguez Vallejo***Cómo citar este artículo / To reference this article / Para citar este artigo: Luna, J. y Rodríguez, C. (2019). Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica. Revista UNIMAR, 37(1), 35-49. DOI: hps://doi.org/10.31948/Rev.unimar/unimar37-1-art2Fecha de recepción: 25 de octubre de 2018Fecha de revisión: 08 de marzo de 2019Fecha de aprobación: 29 de abril de 2019El presente artículo es el resultado de una investigación y del objetivo de hacer visibles las concepciones metodológicas en lectura crítica, como un insumo de análisis para que los docentes de media académica fortalezcan los procesos de enseñanza y aprendizaje a partir del diálogo entre pares y de una formulación de líneas de formación. La escasa fundamentación teórica que los docentes tienen respecto al uso de la lectura crítica en sus procesos de formación, hace de su importancia para la enseñanza y el aprendizaje, un aspecto reduccionista en la educación. Dentro de la lectura crítica y el desarrollo del lector crítico, es necesaria una formación desde el conocimiento, la metodología y la evaluación de este proceso. Además, se debe establecer que son importantes los diálogos entre docentes, para resaltar de esta forma las metodologías más propicias y los métodos más idóneos para desarrollar y fortalecer los procesos de formación de lectores críticos. Palabras clave: Concepciones metodológicas, lectura crítica, líneas de formación, práctica docente. Methodological conceptions that teachers apply and know in critical readingThis article is the research and the objective result of making visible the methodological conceptions about critical reading, as an analysis input so that high school teachers strengthen their teaching and learning processes, starting from the dialogue between peers and training lines formulation. The scarce theoretical foundation that teachers have regarding the use of critical reading in their training processes, makes their importance for teaching and learning, a reductionist aspect in education. Inside the critical reading and the critical reader development is necessary a formation from knowledge, methodology and evaluation of this process. In addition, the most important aspects of the communication between teachers need to be established so that this form highlights the most appropriate methodologies and the best methods to develop and strengthen the processes of training critical readers.Key words: Methodological conceptions, critical reading, lines of training, teaching practice.* Artículo Resultado de Investigación. El proceso de esta investigación se desarrolló desde agosto de 2016 hasta octubre de 2018, con base en la necesi-dad presentada por los docentes, en cuanto a llevar procesos de formación acerca de la lectura crítica; además, determinar la importancia que tienen la lectura y el fortalecimiento del pensamiento crítico en los estudiantes. La investigación se concentró en los grados superiores del bachillerato (media académica) en un colegio privado de la ciudad de Pasto.** Magíster en Pedagogía. Docente de la Institución Educativa Ciudad de Pasto, Pasto, Nariño, Colombia. Correo electrónico: jdluna37@misena.edu.co*** Magíster en Pedagogía. Docente del Colegio Sagrado Corazón de Jesús – Hermanas Bethlemitas, Pasto, Nariño, Colombia. Correo electrónico: acrodriguez1187@gmail.com
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.36Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo37RESUMOConcepção metodológica que usam e conhecem os docentes em leitura críticaResumoO presente artigo é resultado da investigação e do objetivo de fazer visíveis as concepções metodológicas em leitura crítica, como entrada de analises para que os docentes do meio acadêmico fortaleçam os processos de ensinamento e aprendizagem, a partir do diálogo entre pares e de uma formulação de linhas de formação. A escassa fundamentação teórica que os docentes têm com respeito ao uso da leitura crítica em seus processos de formação, faz de sua importância para o ensinamento e aprendizagem, um aspecto reducionista na educação. Dentro da leitura crítica e o desenvolvimento do leitor crítico é necessária uma formação desde o conhecimento, a metodologia e a avaliação deste processo. Além disso, se requer estabelecer que os diálogos entre docentes são importantes, a m de destacar as metodologias e os métodos mais adequados e apropriados para desenvolver e fortalecer os processos de formação de leitores críticos.Palavras-chave: concepções metodológicas, leitura crítica, linhas de formação, prática do ensino.citaban, y esto corresponde al 78 % de ellos, que no leen críticamente. Frente a esta situación, surgieron las siguientes pre-guntas, las cuales orientaron el diseño metodológi-co y permitieron abordar el fenómeno para conocer las concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes:¿Cómo fortalecer los procesos de formación en el servicio del profesorado a partir de la comprensión de las concepciones metodológi-cas que usan y conocen los docentes en lec-tura crítica, en la educación media académica del Instituto San Francisco de Asís?¿Cómo describir la percepción que el profesorado tiene acerca de su metodología, importancia y pertinencia de la lectura crítica en su práctica pedagógica?¿Cómo analizar las ideas metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica para la enseñanza y el aprendizaje de sus áreas?¿Cómo proponer líneas de acción formativa docente según el conocimiento, la metodología y la evaluación de la lectura crítica?Surge entonces una hipótesis al respecto: si los do-centes del ciclo de media no conocen hacia dónde deben ir los estudiantes para poder llegar a desa-rrollar una lectura crítica, la institución estará de-sarrollando actividades y usando herramientas que pueden no estar aportando al fortalecimiento de esta competencia; así, las prácticas pedagógicas no le otorgarían herramientas al estudiantado para que pueda desarrollar procesos de metacognición con el uso de la lectura. La primera pregunta justica la importancia de la investigación, porque está orientada a lograr el for-talecimiento de las prácticas pedagógicas a partir de los procesos de formación de los docentes. Gómez y Zemelman (2006) tienen en cuenta que el hecho de formar, depende del formarse, porque los docentes son constructores de su propio conocimiento, y al hacerlo, se va a ver reejado el impacto en los es-tudiantes; incluso, solamente al generar que el do-cente se cuestione, caso que se presentó al ejecutar una de las técnicas de recolección de información, se puede originar un cambio signicativo de las prácticas pedagógicas que promueven el buen des-empeño académico de los estudiantes.El objetivo de la segunda pregunta describe las me-todologías que los docentes tienen cuando hacen uso de la lectura dentro de los procesos de ense-ñanza y aprendizaje, resaltando la importancia y la pertinencia de este proceso dentro de las prácticas. La tercera pregunta enfatiza el impacto que tienen en el escenario estudiantil, las metodologías, desde el uso y conocimiento para la enseñanza y el uso y conocimiento para el aprendizaje, porque no siem-pre lo que es usado en la enseñanza es visto como opción para el aprendizaje. Finalmente, la investigación desarrollada es de gran impacto académico porque los resultados arrojados lograron establecer una concepción de la lectura crítica institucional; además, se logró resaltar los aspectos fuertes y débiles cuando los docentes utili-zan la lectura dentro de sus prácticas pedagógicas, tan necesario para que la base epistemológica, me-todológica, gramatical y evaluativa de la lectura se considere un campo en el cual se deben formar los docentes. En consideración a lo anterior, el conocimiento, el proceso y la valoración, diseñan las líneas de forma-ción, porque el propósito fundamental es reconocer que la lectura crítica no es netamente un proceso del área de Castellano, sino por el contrario, de cada una de las áreas en las cuales los estudiantes están siendo preparados.De esta forma, la preparación del lector crítico se fortalece por cada disciplina de interacción, a partir de unos objetivos propuestos dentro de la investiga-ción; el objetivo general está concebido en el forta-lecimiento de los procesos de formación en servicio del profesorado, a partir de la comprensión de las concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica, en la educación media académica del ISFA. Por otra parte, los objetivos es-pecícos están diseñados para describir la percep-ción que el profesorado tiene acerca de la metodo-logía, importancia y pertinencia de la lectura crítica en su práctica pedagógica, como también para ana-1. IntroducciónLa lectura crítica, desde la presente investigación, aporta a consolidar fuertes bases de construcción semántica, cuando es el docente quien la usa como herramienta y estrategia metodológica en sus pro-cesos de enseñanza y aprendizaje; es decir, ésta per-mite llegar a niveles de interpretación más profun-dos, siempre y cuando el docente la considere como fuente de fortalecimiento académico. Los docentes del Instituto San Francisco de Asís (ISFA) consideran la importancia de la lectura den-tro de los procesos de aula, pero no cuentan con los conocimientos sucientes para desarrollar prácticas signicativas; es más, no tienen un modelo institu-cional de lector denido como base para poder for-mar, sino que, por el contrario, las diferentes áreas consolidan un lector que solamente funciona en un escenario de disciplina. Por esta razón, es importante que los docentes am-plíen su escenario de interpretación, debido a que los textos requieren de todas las ciencias para poder ser descifrados. De esta forma, los estudiantes de se-cundaria podrían lograr niveles de comprensión y pensamiento de lector crítico a partir de sus lecturas; además, detallar en cada diálogo con el texto, qué re-cursos metódicos son necesarios para llegar a esta-blecer una lectura crítica de los textos en el ISFA, con los estudiantes de grados décimo y décimo primero. Conocer qué tan ecientes son las metodologías que se imparte dentro del salón de clase es tan im-portante, como saber los objetivos de formación de un área o asignatura; por ello, la metodología de investigación se ciñó desde la perspectiva cualita-tiva, dado que aporta para la comprensión de los fenómenos en torno al manejo de los signicados y experiencias, porque lo que se estableció en este encuentro fueron los diálogos y la implicación de estos en las metodologías para el fortalecimiento de la lectura crítica. Así, se hizo necesario conocer las bases conceptua-les con las cuales los docentes se basan para pla-nicar y ejecutar sus clases, desde el ámbito de la lectura como proceso para llegar a un desarrollo crítico del texto, pensamiento que colaboró dentro del ISFA, a fortalecer la evaluación que cada uno de ellos hace de su propia práctica pedagógica.De esta forma, si las prácticas pedagógicas son re-signicadas y evaluadas constantemente, los des-empeños lectores de los estudiantes pueden lograr un fortalecimiento, porque al evaluar las metodolo-gías, se diseñará nuevas planicaciones para lograr los objetivos del área, a partir del uso de la lectura dentro de cada disciplina. Por esta razón, es importante manifestar que en las Pruebas Saber 11 de 2017, los estudiantes, desde un nivel de desempeño de lector crítico, no lograron los resultados esperados, y obtuvieron 59 puntos, en promedio. Si bien estos deben deducir y com-binar procedimientos para realizar tareas, 28 no lograron identicar la tarea que estas pruebas soli-
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.38Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo39lizar las ideas metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura crítica para la enseñanza y el aprendizaje de sus áreas, y para proponer líneas de acción formativa docente según el conocimiento, la metodología y la evaluación de la lectura crítica. Todo lo anterior responde a las preguntas de orientación mencionadas, ya que la lectura es de gran relevancia para iniciar con una alfabetización crítica dentro de los escenarios académicos, dado que, según Cassany (2006), ésta no debe concebirse desde un pensamiento medieval que implica oralizar la grafía; no; se debe pensar desde el aporte cultural e histórico que tiene la interacción con la realidad, a partir de su uso como medio para conocerla. 2. MetodologíaPara hacer visibles las concepciones metodológicas de los docentes se usó como primera medida, una prueba piloto diseñada especícamente para detallar cómo conciben la lectura crítica desde sus prácticas pedagógicas. Los conceptos que esta prueba manifestó otorgaron la importancia a la investigación, porque este proceso no era considerado importante dentro de las clases. A esta etapa se la llamó de exploración, ya que, basándose en el conocimiento previo de los investigadores, hubo un insumo pertinente para discurrir el hito investigativo. A partir de la contextualización del problema con la bibliografía y del contraste otorgado con el análisis de las Pruebas Saber 11 de 2017, se pudo evidenciar que los niveles de desempeño de los estudiantes en pruebas de lectura crítica no eran alentadores. Por esta razón, y a partir de la propia descripción de las prácticas pedagógicas de los docentes, se reconoce que ellos, al no manejar dentro de sus clases proce-sos de lectura, podrían mejorar sus prácticas a par-tir de una formación. Desde un enfoque interpretativo, con un método descriptivo comprensivo, se diseñó dos instrumen-tos de recolección de datos: el guion de observación y la entrevista al grupo focal, los cuales fueron apli-cados, previo juicio de expertos y validación del instrumento a dos docentes del área de Castellano, dentro de una unidad de trabajo de trece docentes con asignación académica en los grados décimo y décimo primero, para extraer información del pro-ceso académico institucional.Para la aplicación del guion de observación se tuvo una muestra de seis docentes, seleccionada con ayuda de la percepción de un directivo docente del Instituto, ya que el criterio para la selección de una cantidad menor fue porque se deseaba trabajar con las asignaturas blandas: Sociales, Castellano y Filo-sofía; y duras: Matemáticas, Física y Química. Posteriormente se hizo el vaciado de la información, la reducción del dato, la utilización de los recursos de análisis (codicación abierta, axial y selectiva), el análisis del dato y su descripción e interpretación a partir de una matriz diseñada por los autores de la investigación, instrumento que colaboró para en-contrar las recurrencias semánticas, para detallar las categorías inductivas que resultaron del proceso de investigación.3. ResultadosPercepción de la lectura críticaLa lectura crítica puede fortalecerse en los ámbitos educativos, según los imaginarios que los docentes tengan de ésta, porque depende de cómo ellos per-ciben la realidad, y si los recursos que encuentran para poder interpretarla están basados en el uso de la lectura como fundamento del aprendizaje. Así, cuando se desarrolla procesos de evaluación a estu-diantes, es cuando los docentes evalúan su práctica pedagógica; es más, surgen ideas en torno a que los malos resultados que obtuvieron los estudiantes en los exámenes, tienen su base en la mala lectura de los mismos. Por ello es importante que los docentes, al reconocer que la lectura es la base fundamental del problema de resolución de pruebas, originen una percepción de lectura crítica según el planteamiento aristotéli-co, como menciona Burlando (2005), en el cual como base se tenga el conocimiento de qué es o a qué se reere, cuando hablamos de lectura crítica y qué ha-cer con eso que sabemos que es. Es necesario que la percepción de la lectura crítica y el saber qué hacer con ella en los escenarios acadé-micos se analice desde la metodología, la importan-cia y la pertinencia de los docentes en sus procesos de enseñanza, para así determinar las estrategias que ayudarán a fortalecer los aprendizajes de los estudiantes.Desde el ámbito de la metodología. La metodología de la lectura crítica se concibe como un proceso para desarrollar y lograr alcanzar un análisis crítico de los textos, pero es necesario que se reconozca que la lectura no debe denirse como una actividad cen-trada en un texto impreso. “Ése no es sino uno de los modos de lectura. La lectura, bien entendida, es una apropiación del mensaje de un autor y el referi-do mensaje puede verterse en una amplia gama de medios y de soportes” (Casas, 2004, p. 411).Para reconocer que la lectura es una herramienta que promueve el pensamiento crítico, es necesa-rio que las instituciones educativas consoliden un modelo de lector a formar y, que los recursos y es-trategias que se puede adoptar en las prácticas pe-dagógicas, sirvan para desarrollar metodologías pertinentes para lograr una lectura crítica.Ahora bien, para denir la metodología es necesario reconocer que uno de los conceptos a los cuales se hace referencia cuando se hace alusión a ésta, es al proceso desarrollado en el aula y a las herramientas que los do-centes usan para generar un lazo entre la información y el estudiante. “La conexión existente entre el uso de instrumentos y el lenguaje afecta a varias funciones psicológicas, especialmente a la percepción, a las ope-raciones sensorio-motrices y a la atención” (Vigotsky, 1978, p. 57); es por ello que cuando un instrumento está bien diseñado y tiene las preguntas idóneas para que los estudiantes puedan apropiarse de él y resolver con ayuda de él sus dudas, se genera una percepción que amplía su capacidad de análisis.La lectura es una herramienta que promueve el aprendizaje y es un motor que impulsa el conoci-miento, siempre y cuando el lenguaje esté acorde con sus herramientas para poder generar una co-municación con los textos, y sea quien coadyuve a generar formas para entender las situaciones textua-les. “La lectura es un proceso que se va enriquecien-do con el tiempo, que va madurando” (Casas, 2004, p. 411). El hecho de no vincular herramientas que nos acerquen a la realidad, hace que el estudiante no entre a ese curso propedéutico, de preparación, ante la necesidad que tiene el hombre de superar ciertas debilidades interpretativas. En este sentido, la lectura debe tener su base en el desarrollo del análisis crítico reexivo, lo cual de-berá “favorecer la formación de ciudadanos reexivos, cuestionadores y con autonomía de pensamiento” (Se-rrano y Madrid, 2007, p. 58), ya como lo proere la Ley 98 de 1993, hay que democratizar el libro para desa-rrollar el pensamiento investigativo y así éste pueda otorgar, en vez de limitaciones intepretativas, ayudas educativas para poder ampliar la comprensión, claro está, desde la mediación que los docentes deben hacer en el proceso de enseñanza y aprendizaje.A pesar de que la lectura sea la columna vertebral de los imaginarios de formación y de los procesos de enseñanza y aprendizaje por parte de los do-centes, esto no es suciente, porque enviar a los estudiantes a que lean sin un debido direcciona-miento no provoca impacto semántico; es más, la no formación a los estudiantes en métodos que los coadyuven a no fracasar en la lectura, pueden ser los causantes de que leer sea algo fastidioso para la juventud, ya que se dice que no se gusta de leer, por el hecho de que no se sabe cómo interpretar lo que se pretende leer. ¿Cómo abordar el texto?, ¿Qué estrategias de análisis se puede ocupar?, ¿Qué sentidos tienen los textos?, ¿Qué ideas contradicen la idea principal?, son algu-nas preguntas que se debe abordar para no fracasar, y para poder “formar lectores que sabrán elegir el material escrito adecuado para buscar la solución de problemas que deben enfrentar” (Lerner, 2001, p. 40), problemas de comprensión que deben ser solventados con las estrategias que los estudiantes adopten para no fracasar en la lectura. El docente debe entender que el estudiante que ad-quiere un nivel de análisis crítico “no es un criticón y, además, la crítica a veces se traduce en un genui-no reconocimiento de la calidad de la información que un texto ostenta” (Casas, 2004, p. 432). La orga-nización de ideas, su jerarquización, integración por categorías semánticas y la relación analógica de las mismas en contextos varios, es el objetivo de un do-cente que promueve el análisis crítico de los textos. Este análisis crítico al cual desean llegar los docen-tes, se lo contrastará con la alfabetización crítica a la cual hace referencia Giroux (1988):En el sentido político más amplio, el mejor modo de entender la alfabetización es concibiéndola como un sinnúmero de formas discursivas y aptitudes cultu-
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.40Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo41rales que permiten acceder a las variadas relaciones y experiencias que existen entre los educandos y la realidad. (p. 34).A un sistema político que entiende que un texto es una cultura por descifrar, y como tal, una organiza-ción que usa códigos que deben ser contextualiza-dos en el campo del lector, en el campo del autor y en el contexto histórico donde se lo lee.Desde la importancia dada en la práctica pedagógica. La lectura crítica complementa la labor del docen-te porque logra prepararlo para manejar las infor-maciones que lleguen a él, sin importar el canal de comunicación usado y las herramientas que fueron ocupadas para su captación. Son dos momentos que deberá tenerse en cuenta para generar lectura críti-ca: el primero, desde el uso que el docente le da al momento de aprender para enseñar, y el segundo, al momento en el que la lectura se convierte en una herramienta para la enseñanza.A partir de las apreciaciones académicas, los do-centes están preparados para poder desentrañar las ideas de los textos; por ello, Carlino (2005) ex-presa que,En esta habitual conguración de la enseñanza, ¡el que más aprende en la materia es el docente!, ya que la mayor actividad cognitiva queda de su parte (investigar y leer para preparar las clases, reconstruir lo leído en función de objetivos propios –por ejemplo, conectando textos y autores diversos para abordar un problema teórico-, es-cribir para planicar su tarea, explicar a otros lo que ha comprendido como producto de años de estudio). La or-ganización de las clases de esta manera no asegura que los estudiantes tengan que hacer lo mismo. (p. 11).Al desarrollar procesos de lectura, el docente cono-cerá qué partes del texto deben tener más análisis y qué estrategias de comprensión son necesarias para obtener un aprendizaje signicativo. Seguir un tex-to base y regirse por lo que escasamente se da del Ministerio de Educación, vuelve al ejercicio lector, una práctica mecánicamente asidua, sin vincula-ción afectiva de las partes que interactúan con él.Desde el aspecto de la interacción con los sujetos en formación, la percepción que se maneja dentro de los docentes es que la lectura no es de interés acadé-mico de sus discentes; existen sentimientos de tedio al leer y esto se da, según la investigación, por la escasa formulación de métodos y herramientas para poder ampliar la comprensión; si el docente expone dentro de su área mecanismos de análisis e inter-pretación, el texto, sea informativo, argumentativo o evaluativo, podrá ser descifrado desde el signi-cado global.Desde la pertinencia en el uso de los procesos de interac-ción. La pertinencia es una cualidad que asigna co-rrespondencia en un momento y lugar determinado; en este caso, a la lectura en la práctica del docente; es posible que este proceso esté presente dentro de los escenarios académicos, pero sin provocar que:…la exigencia de lectura articulada cumpla la fun-ción de problematizar cada contenido particular, en la medida en que contribuya a romper con los límites de la organización de contenidos, o sea, con los pro-ductos de la historia que han sido cristalizados por la reexión teórica. (Gómez y Zemelman, 2006, p. 2).El objetivo es que las lecturas estén diseñadas para provocar una extrapolación de sentidos; es decir, una acción complementaria que amplíe la posibili-dad de comprensión, la relación con los conceptos, las ideas, los métodos, los recursos de cada discipli-na, ya que la lectura es una herramienta de inicio o cierre en el proceso de enseñanza y aprendizaje. La pertinencia de la lectura crítica está supeditada desde dos campos: el primero se reere al interés lector y el segundo, a la orientación lectora; desde el interés, si el docente no es sensible ante lo que los estudiantes desean y ejerce su trabajo dialógico en contra corriente a un analista crítico, no le daría voz al sujeto discente. Este acto democrático fracasaría y el aspecto dialó-gico entraría en un discurso positivista y reduccio-nista de la clase. Por ello, el pensamiento crítico se complementa con el método de análisis crítico del discurso, debido a que éste “intenta contribuir a dotar de poder a quienes carecen de él, con el n de ampliar el marco de la justicia y de la igualdad sociales” (Van Dijk, 1999, p. 24), a partir de lo cual se destaca que la lectura tiene un interés inherente en la actividad diaria de los estudiantes, para ampliar así el interés que tiene y se merece el leer. Podrá haber interés por la lectura, pero cuando no hay interés por sobrepasar la dicultad de com-prensión, el texto no otorgará toda su construcción signicativa: “la posibilidad de saber cuándo y por qué no entendemos un texto determinado y qué podemos hacer para entenderlo; es decir, en la uti-lización de estrategias para gestionar y regular la propia comprensión” (Monereo, Castelló, Clariana, Palma y Pérez, 2006, p. 187), es la base fundamen-tal, ya que replantear los propios métodos de lectu-ra provoca que se genere más estrategias para poder comprender los textos más difíciles. Desde la orientación lectora, es importante que los docentes, indistintamente del texto usado para las clases, tengan una supervisión constante e identi-quen los problemas de comprensión de sus estu-diantes; el escenario de la lectura tiene que ser un espacio planicado y programado por los docentes, con todos los requerimientos de análisis para que, si llegase a haber un problema, la lectura sea la herra-mienta de acercamiento a la resolución del proble-ma causado por la misma, teniendo en cuenta que es una herramienta a partir del planteamiento de Vigotsky (1978), porque tiene la posibilidad de acer-car a los estudiantes a la realidad.Ideas metodológicas que se usa y conoce en lectura críticaEn la labor del docente se hace relevante visibilizar las herramientas que usa para enseñar, y cómo éstas posteriormente pueden ser convertidas en recursos para sobrepasar las dicultades que los estudiantes pudieran encontrar en sus lecturas, además de ser parte de las metodologías que tiene.Uso de herramientas metódicas para la enseñanza y el aprendizaje. El proceso de enseñanza y aprendiza-je se fortalece con la recursividad de cada docente; sin embargo, es pertinente aclarar que este trabajo debe “obrar de una manera ordenada y calculada para alcanzar unos objetivos previstos; en otras pa-labras, con un orden y disposición determinados” (Carrasco, 2004, p. 33); cada actividad debe tener las instrucciones para el desarrollo adecuado y esto se lo logra con el uso preciso de las herramientas. Desde el campo metodológico, los docentes tendrán que reconocer que la herramienta es muy importan-te para despertar el interés; es decir, ésta puede con-vertirse en una estrategia que posibilite a los estu-diantes la mejor comprensión de los textos; a su vez, si es asimilada, podrá convertirse en una estrategia de aprendizaje que los promueva a llegar a otro co-nocimiento,Los procesos de decir y transformar el conocimiento tienen su par conceptual en el campo del aprendizaje. Éste puede ser concebido como adquisición e incremento del conocimiento por medio de la reproducción de información ya elaborada o como proceso creativo donde construyen signicados. (Narváez y Cadena, 2008, p. 38). Por esta razón, es necesario manifestar en la Tabla 1, algunas estrategias institucionales que se tiene en cuenta para desarrollar procesos de aprendizaje al-rededor del uso de la lectura en los escenarios aca-démicos, según los testimonios de los sujetos:Tabla 1. Estrategias institucionales para desarrollar la lectura críticaTestimonioEstrategia con base en“Las herramientas que uno puede utilizar para acercar al individuo hacia la lectura de una forma ana-lítica” (S2, E, Prl, 23)Desarrollo de pen-samiento crítico.(Preguntas preci-sas)“Leer bastante para que se infor-men en otros contextos; por ejem-plo, sociales, política, textos his-tóricos, losócos para tener una metodología precisa” (S4, E, Prl, 23)Dinámicas de in-tertextualidad. (Textos varios)“Hace que nuestros estudiantes se vuelvan críticos y ellos mismos tengan posibilidad de analizar, de interpretar, de argumentar” (S7, E, Acr, 16)Aprendizaje por descubrimiento.(Motivación por parte del docente)“El proceso de la lectura debe ser continuo, renovando este tipo de lecturas” (S10, E, Acr, 16)Lectura dirigida y continua.Actualización do-cente.“Básicamente, cada uno es una forma de lenguaje; como es una forma de lenguaje, todo se integra en la lectura” (S6, E, Lcd, 21)La lectura como base del lenguaje.(Todo se puede leer)
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.42Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo43“Si un estudiante no lee, no tiene este proceso, no va a ampliar su conocimiento” (S7, E, Lcd, 21)La lectura como mediación entre el estudiante y el co-nocimiento. “La docente se apoya en los estu-diantes para lograr los objetivos de la actividad” (S1, O, Lce, 22)Aprendizaje cola-borativo.(Conocimiento compartido) “Los estudiantes presentan cues-tionamientos constantes frente a la lectura que desarrollan” (S1, O, Lce, 20)Pregunta proble-matizadora.“Ampliar el interés que tiene y se merece el leer” (S4, E, Ile, 13)Despertar el inte-rés por la lectura.“Si nosotros mantenemos a los es-tudiantes preparándose para esto desde todas las asignaturas, en-tonces para ellos va a ser más fácil poder analizar e interpretar esas lecturas” (S7, E, Orl, 19)Preparación insti-tucional e interdis-ciplinaria. “Adentrar al sujeto a la lógica; si yo adentro a la lógica a los estudian-tes, cumpliré con esos desempe-ños, desde lo literal, lo inferencial y la proposición” (S1, E, Orl, 19)Niveles de lectura (literal, inferencial y crítico-intertex-tual). “Fortalecimiento dentro de cada área, donde el estudiante pueda desarrollar sus habilidades analíti-cas y comprensivas” (S2, E, Orl, 19)Desarrollo de habi-lidades de lectura. “Utilizo diferentes programas, software, aplicaciones para reali-zar a partir de una lectura, dife-rentes actividades” (S7, E, He, 47)Utilización de las TIC para la ense-ñanza de la lectura crítica.“Es necesario que más que una capacitación, se dé un estado de formación” (S1, E, Flcd, 19)Formación docen-te y diálogo entre áreas. El análisis de los testimonios de los sujetos permi-te entender el componente metodológico y estra-tégico de los docentes, y los recursos que tienen cuando usan la lectura como una fuente de ense-ñanza y aprendizaje; no obstante, no se especica el cómo ni el qué hacer con lo que los docentes saben, para poder lograr mejores resultados. Ésta es la invitación: ampliar los conocimientos del docente para saber qué hacer con lo que sabe y maneja, y así despertar el pensamiento crítico de los estudiantes.Líneas de acción formativa en lectura críticaLos resultados de las percepciones y de las ideas metodológicas acerca de la lectura crítica indican que se debe fortalecer la formación permanente de los maestros y que, como parte de su formación continua, se proponga y establezca líneas de acción enfocadas a la construcción de nuevos conceptos, métodos y metodologías sobre lectura crítica, para así adecuarlos en el desarrollo académico de lo que usan y conocen. Hay que reconocer que el docente, cuando apren-de, modica sus metodologías, porque ahonda en la comprensión de los posibles problemas de inter-pretación que haya tenido para llegar a comprender el mensaje, puesto que la curiosidad epistemológica genera cimientos más signicativos para llegar a decodicar críticamente.Es que el proceso de aprender, en el que histórica-mente descubrimos que era posible enseñar, como tarea no solo incrustada en el aprender sino perlada en sí, con relación a aprender, es un proceso que pue-de encender en el aprendiz una curiosidad creciente, que puede tornarlo más y más creador. (Freire, 2004, p. 12).Por esta razón y, según el análisis de las concepcio-nes metodológicas en torno a la lectura crítica de los docentes, se hace necesario proponer unas líneas de formación de manera unicada para todos ellos, sin importar el área o disciplina en la que estén titula-dos, desde el conocimiento, la metodología y eva-luación de la lectura crítica. Aunque se haya dado unas líneas de formación a partir del análisis de las debilidades y fortalezas de los docentes, se ha diseñado un folleto de interacción con el cual contará la institución, para subsanar algu-nas debilidades desde la epistemología, metodología y evaluación de la lectura crítica, y que puede ser de-tallado en hp://lectuisfa.blogspot.com/, como aporte a la formación autónoma de los docentes.En él se detalla las metodologías más adecuadas al trabajo pedagógico dentro del contexto, el tipo de evaluaciones que más impacto puedan causar y es-trategias de preguntas para diseñar herramientas que lleven a los estudiantes a producir y fortalecer su pensamiento crítico.Formación pedagógica y didáctica. Es necesario que los docentes tengan una formación teórica con res-pecto a la lectura crítica. A pesar de que los pro-cesos empíricos son importantes y de gran valor cultural, se hace evidente que la teoría sea asimi-lada desde la metodología, método, herramientas y acciones didácticas, porque el trabajo académico depende del proceso de autoformación que se lleve para ser recursivo. Capacitar a los docentes brindará seguridad al mo-mento de discurrir sus prácticas pedagógicas, lo cual generará en su discurso, características argu-mentativas fuertes que harán del escenario educati-vo, un encuentro seguro para los estudiantes, dado el caso que ellos tengan en cuenta la lectura como una herramienta para resolver las dudas de éstos, y así ampliar el panorama de comprensión. Finalmente, así como lo maniesta Carlino (2005), los docentes, al ser direccionados por un camino de análisis de sus prácticas pedagógicas, pueden apor-tar a la transformación de las prácticas de enseñan-za; de esta forma, todo lo que se evidencie en este escenario podrá ser asimilado por los estudiantes, para que posteriormente las herramientas didácti-cas usadas por los primeros, puedan ser usadas por los segundos, para lograr sobrepasar las limitacio-nes que se tiene al intentar comprender un texto, y así lograr procesos de metacognición en ellos.Espacios de diálogo para innovar en el aula. El conoci-miento puede desarrollarse a partir del diálogo que los docentes puedan establecer, porque las experien-cias de las prácticas pedagógicas pueden ejempli-car cómo las estrategias de enseñanza y aprendizaje están funcionando dentro del aula; por ello, en ese diálogo íntimo entre docentes puede compartirse ideas, reformular estrategias, incluso forjar nuevos paradigmas, para tener en cuenta en la enseñanza.En este diálogo en el cual se evidencia poderes discursivos, es relevante manifestar que el docente “debe estar consciente del poder del discurso ideológico, comenzando por el que proclama la muerte de las ideologías” (Freire, 2004, p. 126), por cuanto ese diálogo puede censurar a otros al querer implantar modelos que, según perspectivas unidireccionales, son los que más funcionan; por otra parte, el discurso debe darse entre las distintas áreas sin discriminación, puesto que en cada una de ellas se puede desarrollar las competencias de comprensión, análisis, interpretación, reexión y proposición.Se reconoce que las asignaturas pueden tener una relación en alguno de sus componentes, porque es posible que la lectura sea ese eje que las atravie-sa, tocando con su ayuda, conceptos, teorías, pa-radigmas, modelos de pensamiento y estructuras semánticas y, de esta forma, al habilitar un espa-cio de diálogo entre docentes, se revive la palabra y el discurso como la base del encuentro con el conocimiento. Al habilitar un diálogo, la autoevaluación está in-herente a los procesos comunicativos interdiscipli-narios porque las experiencias harán que la propia práctica pedagógica de cada docente se evalúe per-sonalmente; además, en este encuentro, las meto-dologías y herramientas que usa y conoce, pueden convertirse en un modelo institucional para utilizar en los procesos de formación. Siempre y cuando se habilite el espacio de diá-logo dentro de la evaluación institucional, se po-dría manifestar la comunicación entre docentes como estrategia de fortalecimiento, desde la for-ma como manejan la lectura dentro de sus disci-plinas, qué herramientas son más efectivas para lograr mejores resultados y las experiencias con métodos de lectura. Así, la institución tendrá al diálogo, como una estrategia dentro de su plan de mejoramiento.Formación para la evaluación. Dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje es necesaria la evaluación, como un recurso para poder extraer datos que se-rán analizados para realizar ajustes a un método y a una metodología. Con esto se conoce las forta-lezas y debilidades del estudiante, se reconoce las fortalezas y debilidades del docente, ya que una evaluación se debe analizar desde dos enfoques: el primero, desde el estudiante, al cuestionarse ¿Qué extraje con ayuda de una herramienta evaluativa? ¿Qué tanto conozco, aprendo, recuerdo, hago, discu-to, propongo, critico?; y el segundo, desde el docen-te: ¿Me sirvió el instrumento evaluativo diseñado?, ¿Qué tan ecaz es la clase para que el conocimiento
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.44Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo45de los estudiantes se amplíe?, entre otras preguntas que se podría originar en esta discusión. La evaluación de la formación hecha por los do-centes es un proceso fundamental para que des-de los dos campos se analice las alternativas para mejorar y fortalecer los procesos de enseñanza y aprendizaje. Es en este campo donde la lectura representa un papel fundamental, como herra-mienta que le permite al docente evaluar ciertos procesos de su área y, al estudiante, como una es-trategia para ampliar la comprensión de la clase.Al establecer una evaluación dentro de los pro-cesos de formación, se debe reconocer que ésta es continua y de tipo heteroevaluativo, co-eva-luativo y autoevaluativo, momentos que tanto por parte del estudiante como del docente, están en la necesidad de ser llevados, por cuanto ha-bilitan el diálogo unidireccional, bidireccional y entre pares de diferentes disciplinas. Por ello se piensa que:…la misma pedagogía como teoría, como disciplina en construcción, no tiene otro objetivo que el de validar conceptos e interpretaciones sobre tales encuentros de enseñanza como encuentros formativos, en medio de los cuales los individuos se habilitan como pensadores e interlocutores competentes. (Flórez, 1999, p. 150).En esos diálogos se da la validación de la expe-riencia de los docentes, desde los conceptos que estos manejan, las metodologías, el modelo pe-dagógico y la evaluación de sus prácticas. La for-mación es muy necesaria ya que si se tiene, por parte de los docentes, un modelo para aprender; inherentemente a este proceso está el de enseñar, porque reconocerán las dicultades que llevó el hecho de aprender. Ahora bien, los docentes deben estar preparados para identicar qué tipo de modelo pedagógico tienen sus evaluaciones y, dado el caso, poder cambiar de paradigma sobre la evaluación y ver este proceso como una posibilidad de mejora-miento y enriquecimiento profesional. Es más: la evaluación permite la integración institucional porque todos los agentes que están inmersos en la formación pueden posibiltar el intercambio de saberes y experiencias para el procesos de ense-ñanza, aprendizaje y evaluación.4. DiscusiónEl signicado que se les otorga a los resultados en un momento determinado es un añadido semánti-co a las prácticas que eran invisibles antes de que emergieran con la investigación, porque al ingre-sar al campo, los docentes, quienes son la unidad de trabajo, maniestan que esta clase de trabajos es importante, dado que ayuda a evaluar cada práctica pedagógica desde otros puntos de vista, en especial desde el campo de la lectura crítica.Por ello es relevante, desde un planteamiento frei-reano, el cual se basa en la democratización del acto de formar y del no adiestramiento, planteamientos y posturas neoliberales (Freire, 2004), habilitar el sonido de las experiencias y actividades invisibles de los maestros, puesto que con esta investigación se le otorgó al docente la conanza que se merece dentro de los procesos de formación de estudiantes; además, se maniesta que pocos estudios se con-centran en una población de educadores, resaltan-do entonces que se reconoce la importancia de los conocimientos, prácticas, ideas, teorías y aspectos empíricos como fuente esencial de la labor docente. En este orden de ideas, se tiene en cuenta el objetivo principal del estudio, el cual era, fortalecer los pro-cesos de formación en el servicio del profesorado a partir de la comprensión de las concepciones meto-dológicas que usan y conocen los docentes en lectu-ra crítica en la educación media académica del ISFA, como insumo analizado para proponer unas líneas de formación que vigoricen su servicio; además, de-tallar en este caminar metodológico investigativo, los hallazgos, las limitaciones, las experiencias, las dudas y las recomendaciones que a lo largo de las diferentes fases del estudio se fue captando, tanto de los sujetos de estudio como de toda la unidad de análisis. Esta investigación deja una impronta que les da re-levancia a esas concepciones olvidadas de los do-centes, que habilita un espacio para la reexión y la evaluación constante de las prácticas pedagógicas; además, reconocer que la teoría y la práctica deben desempeñar un papel importante, pues la práctica, cuando no se apoya en la teoría, puede no tener un objetivo claro de aprendizaje; en otras palabras, “la reexión crítica sobre la práctica se torna una exi-gencia de la relación Teoría/Práctica sin la cual la teoría puede convertirse en palabrería y la práctica en activismo” (Freire, 2004, p. 24). Así, las herra-mientas sin un uso preciso pueden provocar que no se alcance los objetivos de enseñanza o que se vean confusos a la hora de querer lograrlos. Esto, como parte investigativa y como base para futuras investigaciones. La base fundamental del estudio fue analizar cómo las concepciones de los docentes marcan un surco de planicación y metodología de clase con base en los procesos de lectura en cada clase; saber cómo esas ideas que pertenecen algunas veces al campo positivista de acción, tienen desde su creación sin praxis, una intención hacia el ámbito de la ense-ñanza constructivista, lo cual quiere decir que los docentes, al desarrollar su idea metodológica en el aula, evidencian escasez de recursos de análisis para la lectura.Según lo anterior, las metodologías de las que dis-ponen los docentes del ISFA son idóneas para desa-rrollar la lectura crítica y, como maniesta Facione (2007), hasta el pensamiento crítico; pero en la apli-cación, los recursos de análisis que éstos tienen son escasos, impidiendo una clase generadora de nue-vos conocimientos, por cuanto no hay bases teóricas que la respalden. La formación del docente nunca termina; ésta es un caminar que se re-signica cada vez que avanza, debido a las nuevas comunidades que desean edu-carse. Cada vez que hay nuevos estudiantes, hay nuevos retos educativos, nuevas perspectivas, nue-vos paradigmas de pensamiento que requieren que los docentes se preparen constantemente; por tanto, deberán reconocer que:Quien se está formando, desde el principio mismo de su experiencia formadora, al asumirse también como sujeto de la producción del saber, se convenza de-nitivamente de que enseñar no es transferir conoci-miento, sino crear las posibilidades de su producción o de su construcción. (Freire, 1996, p. 24).Y entonces, crear posibilidades para que sean los es-tudiantes, quienes con ayuda de la mediación hecha por parte del docente, sean coautores de su conoci-miento; esto quiere decir que la democratización del acto de enseñanza debe darse de forma que habilite la voz de los participantes, que reconozca sus estilos de aprendizaje y facultades, para que de esta forma, todos, sin excepción, lleven a cabo las actividades programadas dentro de la metodología de clase. Como fundamento metodológico se destaca el pa-radigma cualitativo, el cual con su método descrip-tivo comprensivo, analizó testimonios a partir de la recolección de información con base en la aplica-ción de una entrevista semiestructurada a un gru-po focal y un guion de observación, instrumentos que fueron ejecutados en un grupo de docentes con asignación académica educativa de media de los grados décimo y décimo primero. La Unidad de trabajo estuvo constituida por trece docentes con quienes se desarrolló la investigación; a partir del diálogo con las directivas, seis de ellos fueron escogidos como práctica situada para captar información con el guion de observación, dado que pertenecen a las áreas fundamentales: Castellano, Filosofía, Sociales, Matemáticas, Física y Química. De los trece docentes, once terminaron satisfactoria-mente la entrevista a Grupo focal; los dos restantes, por motivos personales se retiraron transcurridos unos minutos de la reunión programada. Con los datos captados se logró analizar, con ayuda de la sistematización de la información, las ideas meto-dológicas que presentaron los docentes en servicio, en torno a la lectura crítica. Por otra parte, como criterio de credibilidad de los datos, los instrumentos que se ocupó para la cap-tación fueron revisados por dos expertos y se hizo una prueba in situ a dos docentes de áreas anes a las humanidades, para que ellos manifestaran su apreciación de los instrumentos. Se contó aproxima-damente con 2.000 datos cualitativos en bruto; para su vaciamiento se usó el paquete de Oce; a partir de las jerarquías semánticas de los testimonios se redujo los datos, que fueron consignados en la codi-cación abierta; posteriormente fueron categoriza-dos a partir de una matriz de recurrencias diseñada por los investigadores, y agrupados en tres catego-rías macro: Percepción, Metodología y Formación en lectura crítica.La información recolectada menciona con frecuen-cia y rearma la importancia de la aplicación del guion de observación, el cual permitió corroborar qué correspondencia hay entre la teoría y la práctica
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.46Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo47de los docentes, porque es necesaria la coherencia entre lo que se dice, se piensa y se hace; y por otra parte, el paradigma de saber que “quien forma se forma y re-forma al formar, y quien es formado se forma y forma al ser formado” (Freire, 2004, p. 25), con el ánimo de que el proceso de enseñanza sea dialéctico y no reduccionista con aspiraciones positivistas.A partir de esto se pudo conocer las inquietudes, ideas, signicados que los docentes tienen de la lec-tura crítica y la concepción metodológica, entendida ésta como el proceso de enseñanza-aprendizaje; no obstante, al expresar sus percepciones alrededor de su práctica pedagógica, desde su interés aportaron ideas acerca de las líneas de formación en las cua-les desean formarse; incluso, a partir de la inmer-sión de los investigadores, surgieron inquietudes en los docentes en servicio, porque fue el diálogo el espacio propicio para que su práctica pueda verse evaluada desde su propia percepción, con base en que enseñar es aprender y al aprender, se conoce los problemas de enseñar. En esta dicotomía entre enseñar y aprender en el proceso de formación, se puede plantear algu-nas preguntas: ¿Cómo la metodología del docente influye en el aprendizaje del estudiante?, ¿La lec-tura puede ser la herramienta base de todas las áreas? Del análisis que el docente haga de su cla-se y de las preguntas que él mencione ¿depende el análisis que desarrolla el estudiante? Para dar respuesta a estos interrogantes se podría retomar las percepciones que tienen los docentes frente a lo que consideran lectura crítica, porque las metodo-logías llegan a ser innovadoras cuando estos han tenido una planicación consciente respecto a los textos que apoyan su planeación. Con relación a la segunda pregunta, se menciona que la lectura puede ser herramienta siempre y cuando los docentes sepan el nivel cognitivo que re-quiere dicho proceso; en otras palabras, que sepan el desarrollo cognitivo que provoca cada estrategia, para que de esta forma los estudiantes extraigan los mensajes de los textos. Además, a partir de la profundización que haga el docente de la temática más las preguntas que coadyuven a explayar el significado de los textos, el mediador puede constituirse como modelo lector. Todo esto se da a conocer con base en el paradig-ma cualitativo, que permitió analizar y comprender el objeto de estudio: la lectura crítica dentro de las asignaturas en media secundaria. En las postrimerías de la investigación, los hallazgos sobre las concepciones acerca de la lectura crítica son escasos, porque algunos docentes desconocen a qué se reere; no obstante, el interés que tienen por involucrar este proceso en sus aulas es signicati-vo, debido a la importancia en su aprendizaje y en el de los estudiantes. Así mismo, aunque presenten herramientas didácticas que involucren a la lectura como su eje principal, no existen las bases teóricas de cómo funciona cada herramienta en los procesos de aprendizaje de los estudiantes; por ende, se ine-re que los docentes son recursivos, pero desconocen qué teorías pedagógicas pueden apoyar su trabajo. Estas concepciones son entendidas como los linea-mientos que orientan la práctica pedagógica; es de-cir, como las ideas, -el proceso mediante el cual se raciocina una situación y surge de éste una conclu-sión-, que tienen acerca de la lectura crítica a par-tir de su percepción, asimilación y equilibrio de la información del contexto asimilable (Piaget e Inhel-der, 2008), y consolidan cada una de sus metodolo-gías desde un ámbito empírico-positivista. Como ya se mencionó, las ideas de cada docente no consagradas en la praxis, tienen un enfoque cons-tructivista; en otras palabras, los docentes piensan constructivamente, pero sus prácticas en la mayo-ría son positivistas; sin embargo, cuando éstas son ejecutadas, ellos no poseen los recursos necesarios para guiarlas por el camino del constructivismo. Se añade a esto que son conscientes que tener diálo-gos entre ellos (interdisciplinariedad) puede gene-rar una evaluación integral de las áreas desde cada práctica pedagógica, y a esto desean llegar: a tener un espacio de diálogo interdisciplinario que forta-lezca cada práctica. Cada respuesta de los docentes apuntó a exaltar el papel de la lectura; no obstante, el tiempo fue una de las condiciones que tuvieron en cuenta para mencionar qué les hace falta para poder llevar otros procesos signicativos, procesos que tengan de base a la lectura. Se debe agregar que los docentes son conscientes del papel que tienen como agentes que fortalecen el pensamiento crítico ante las exigencias interpre-tativas de hoy en día; es más, así como lo maniesta Habermas (1993), para entender la realidad es nece-sario conocer históricamente el ámbito cultural del autor y la psicología que impulsó la creación del tex-to, entre otros aspectos de la vida en sociedad. Los maestros reconocen que la integración de las áreas podría aportar de forma individual a un diálogo interdisciplinario que habilite en el estudiante, una puerta hacia el pensamiento crítico. Todo lo anterior desemboca en el interés que los do-centes tienen de capacitarse y poseer recursos con-ceptuales que les ayuden a interpretar los textos y la realidad de una manera crítica; “iniciar una relación de conocimiento exige, en primer lugar, colocarse frente a la actividad. Esto implica ver cómo ella in-uye en el sujeto y cómo éste puede transformarla” (Gómez y Zemelman, 2006, pp. 10-11). Para poder interpretar la realidad es necesario contar con las herramientas y conocimientos que coadyuven al do-cente a desenmarañar la intención de los mensajes ocultos en los textos; incluso, con esto se maniesta que los medios y formatos que en la actualidad se tiene para leer, hacen parte de los insumos que se necesita para desarrollar las actividades.Por esta razón, la preparación y la intención que tie-nen los docentes por formarse, es por antonomasia, lo más importante; por ello se trae a colación que se aprende enseñando y se enseña aprendiendo, ya que ellos deben ser conscientes de que los estudian-tes generan nuevos retos educativos y que, al acep-tarlos, el trabajo es democrático y vinculante a toda la población educativa. Finalmente, para posteriores estudios se recomien-da contar con la población general de los docentes, debido a que la lectura crítica puede desarrollarse desde los grados académicos inferiores, permitien-do con esto mayores contrastes ante los testimonios que se pueda encontrar, y así puedan aportar en un diálogo investigativo, nuevas ideas en torno al de-sarrollo de la lectura, porque el conocimiento se da en una comunicación entre varios. Por otra parte, conviene tener en cuenta que puede haber, desde el intersticio cuantitativo, otros instrumentos que a su vez podrían provocar otros análisis, siempre y cuando se integre a este tipo de investigaciones un paradigma mixto.5. ConclusionesDurante esta investigación se pudo evidenciar que los docentes de nivel media del ISFA de Pasto deben fortalecer el aspecto conceptual y reformular sus prácticas pedagógicas con base en la lectura crítica, pues fueron ellos quienes siempre mostraron inte-rés y agradecimiento por el proceso realizado, y son conscientes de su papel como agentes directos que promueven recursos para desarrollar procesos que fortalezcan el pensamiento crítico. Por lo tanto, de-sean, con ayuda de la lectura, ofrecer una formación integral para fomentar el análisis crítico y reexivo a través del uso de herramientas que generen la cri-ticidad; no obstante, en la práctica pedagógica no se pudo evidenciar el uso de la lectura como base del pensamiento crítico.Los docentes deben contar con bases teóricas que les permitan fortalecer el proceso lector en los estu-diantes, pero escasamente saben si las estrategias que están usando aportan a alcanzar un desarrollo del pensamiento crítico en éstos; la lectura en ellos se limita a ser una herramienta para la enseñan-za, y no reconocen que a partir de ella se puede producir avances signicativos de comprensión, interacción social y contextual, para lo cual es ne-cesario dar un valor a la lectura crítica dentro del escenario metacognitivo.La percepción de los maestros sobre lectura crítica se basa en el proceso y recurso que utilizan para desarrollar el pensamiento crítico; no tienen clari-dad de la orientación y formación en este ámbito, pues utilizan cuestionarios con respuestas conclusi-vas sin determinar el ejercicio de lectura que el es-tudiante realiza, previo a la respuesta; además, no desarrollan una debida introducción a los procesos lectores como método para llevar a cabo en el aula; sin embargo, escasamente conocen que la plani-cación es la base para un desarrollo metodológico pertinente para lograr que los estudiantes tengan una asimilación conceptual y procedimental de los textos. Todo esto debería tener su base en un mode-lo pedagógico determinado; en la práctica fue posi-ble determinar el modelo pedagógico positivista, lo cual hace entender que cuando la lectura no tiene
Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.48Revista UNIMAR 37(1)- Rev. Unimar - pp. 35-49.ISSN: 0120-4327, ISSN Electrónico: 2216-0116, Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia, 2019.Concepciones metodológicas que usan y conocen los docentes en lectura críticaJohnny Danilo Luna Martínez, Carolina Rodríguez Vallejo49orientación para lograr extraer los signicados, ésta no tiene validez en la formación de los estudiantes; incluso no es un recurso para generar conocimiento. Los docentes reconocen que la lectura es un campo muy amplio que requiere acompañamiento perma-nente; sin embargo, la participación es limitada y se reduce a lo que el perl del docente pueda ofrecer. La lectura puede ser una mediadora entre el sujeto y el sentido social; la integración curricular permite que la lectura se explaye hacia todas las dimensio-nes del estudiante, para lograr un mejor aprovecha-miento del contenido textual; aquí se resalta que los docentes reconocen que la lectura crítica enri-quece los proyectos y los aprendizajes, y como tal, tiene una importancia signicativa porque permite combatir el analfabetismo funcional, en donde los estudiantes no proponen, analizan ni reexionan sobre lo que están leyendo y lo que se encuentra en el entorno. Por ello, es importante establecer el for-talecimiento de las prácticas pedagógicas con base en la lectura crítica, puesto que, indirectamente, los estudiantes generarán un mejor proceso, dado que el docente es uno de los tantos modelos lectores que éstos pueden seguir.Al interior del aula se pudo evidenciar que los do-centes no realizan prácticas de lectura previa para la planeación y preparación de clases, lo cual se establece como una debilidad porque al tener un contacto permanente con los estudiantes, podrían dinamizar de forma correcta el interés por el saber y usar estrategias correctas para que estos logren una adecuada lectura crítica; a partir de una adecuada orientación lectora podrían extraer los signicados, conceptos, proposiciones, teorías dentro del escena-rio pragmático del texto, lo que hace fundamental el manejo de una base conceptual del pensamien-to crítico. Los docentes desarrollan actividades sin profundidad teórica ni relación con la temática que se está abordando, los estudiantes lo perciben de la misma manera y en su mayoría las clases son de corte positivista, abordando la lectura como un pro-ceso supercial de donde se extrae información; por ello se deduce que de la formación del docente de-pende la perspectiva sobre la lectura crítica.El proceso de enseñanza y aprendizaje se fortalece con la recursividad de cada docente; ellos imple-mentan la lectura en sus clases, pero no tienen la debida supervisión, lo que no garantiza el uso ade-cuado de la misma como herramienta de interacción con el estudiante. La efectividad de las herramien-tas utilizadas en el aula depende de la pertinencia con la que el docente las aplique; contrario a esto, los maestros no buscan implementar estrategias para contrarrestar el impacto negativo en el proceso lec-tor de los estudiantes, pues para que una estrategia de enseñanza funcione, debe existir un direcciona-miento estratégico por parte del docente; por otra parte, se reconoce que dentro de los escenarios aca-démicos debe existir motivación para llevar prácti-cas lectoras que desarrollen niveles de comprensión mayor. En consecuencia, el momento de la lectura debe tomarse como una oportunidad en la que se comparte signicados en varios contextos.Se requiere concientizar a la población educativa de que la alfabetización crítica debe hacerse en todas las disciplinas, porque la experiencia investigativa sumerge a los docentes en el ambiente del interés por saber más acerca de los procesos que tienen que ver con la lectura, y de esta manera se pueda es-tablecer la relación que ésta tiene con los procesos que fortalecen el pensamiento crítico; además, que se reconozca que en los procesos de lectura siempre habrá retos de interpretación, y uno de ellos es aba-lanzarse a tenerla como nuestra mejor aliada en los procesos de formación.Finalmente, como resultado de esta investigación, los docentes necesitan formarse en líneas de acción pedagógica y cognitiva para fortalecer las bases teó-ricas de su metodología, acompañados de un proce-so de evaluación institucional que determine a pro-fundidad y con particularidades, las dicultades que tienen en el aula con respecto a la metodología y el proceso de enseñanza y aprendizaje con base al uso de la lectura crítica; para ello es propicio es-tablecer espacios de diálogo con el n de lograr un intercambio de saberes a partir de sus experiencias en el aula.A partir de lo anterior, los docentes solicitan capaci-tación y formación en aspectos relacionados con la lectura crítica; por lo tanto, las líneas de formación les permiten nuevas oportunidades para construir una nueva concepción de los procesos de enseñan-za, al partir desde un análisis particular a lo institu-cional. No se debe desconocer que son ellos los pila-res de la educación y que por tanto en ellos recae en gran medida la responsabilidad de formar integral-mente al estudiante. Los docentes del ISFA de Pas-to no son ajenos a esta realidad y por eso expresan su intención de formarse en los aspectos necesarios para brindar una educación de calidad basada en los principios franciscanos y profesionales que cada uno posee.6. Conicto de interesesLos autores de este artículo declaran no tener nin-gún tipo de conicto de intereses del trabajo pre-sentado. ReferenciasBurlando, G. (2005). Recepción suareciana de Aristóteles: percepción, representación y verdad. Revista Filosóca de Coimbra, 28, 323-348.Carlino, P. (2005). Escribir, leer y aprender en la universidad. Una introducción a la alafabetización académica. Buenos Aires, Argentina: Fondo de Cultura Económica.Carrasco, J. (2004). Estrategias de aprendizajer, para aprender más y mejor. Madrid, España: Rialp.Casas, R. (2004). 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