Deserción escolar en pandemia en Puerto Guzmán, Putumayo, Colombia
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Ángela Consuelo Bustos Narváez
Revista Criterios - 30 (2) Julio- Diciembre 2023 Rev. Criterios - pp. 99-109
ISSN: 0121-8670, ISSN Electrónico: 2256-1161
https://doi.org/10.31948/rev.criterios
Universidad Mariana, San Juan de Pasto, Nariño, Colombia.
académicos y las acciones llevadas a cabo por
el gobierno municipal y nacional. Las opciones
de respuesta eran: Excelente, Bueno, Regular,
Malo o Pésimo, que debían ser contestadas
según el criterio de cada estudiante desertor
encuestado, justicando su respuesta.
La tendencia de las respuestas de los
estudiantes marcó, como principal causa,
la situación económica desencadenada por
el COVID-19, que les impidió seguir con sus
estudios, ya que no contaron con los recursos
para poder adquirir los medios tecnológicos;
algunos tuvieron que ayudar con los gastos de
la casa y otros debieron desplazarse a las ncas
para trabajar, al ver que sus padres tuvieron
que cerrar sus negocios.
También dijeron haber tenido problemas de
estrés y depresión que les impidieron seguir
con sus estudios, ya que les aigió el cambio
de vida, el sufrimiento por la pérdida de un
familiar y, el encierro; es decir, que hubo
afectación en su salud mental, coincidiendo
con lo que maniesta el Fondo de las Naciones
Unidas para la Infancia (UNICEF, 2020). Sus
padres no podían acompañarlos a realizar
sus tareas escolares porque se encontraban
trabajando y, aquellos que sí podían hacerlo,
no contaban con los conocimientos necesarios
para apoyarlos.
Los estudiantes desertores encuestados eran
conscientes de que contaban con capacidades
intelectuales y la actitud para continuar su
proceso de enseñanza-aprendizaje, pero
prerieron ocupar su tiempo haciendo
actividades diferentes a las académicas, como:
hacer deporte, trabajar o pasar el tiempo en
redes sociales. Asimismo, reconocieron en su
mayoría que el estudio brinda las herramientas
necesarias para enfrentar su futuro.
Por otra parte, al indagar acerca de si contaron
con las herramientas tecnológicas necesarias
para acceder a las clases virtuales en tiempo
de pandemia, en su mayoría dijeron que no
y, quienes las tenían, debían compartirlas con
algún hermano u otro pariente.
En lo referente a las metodologías utilizadas
por la institución educativa y los docentes para
manejar el proceso educativo en la pandemia,
la mayor tendencia se centró en manifestar
que la forma cómo fueron impartidas las clases
en ese momento fueron buenas y excelentes,
ya que cumplían, por un lado, con el objetivo
de evitar los contagios y, además, fueron
útiles; había una explicación clara de los temas
y los docentes atendían de forma continua a
los estudiantes a través de diferentes medios,
mayormente por la aplicación WhatsApp y
llamadas telefónicas. Igualmente, un alto
porcentaje de los educandos calicó como
excelentes, las guías entregadas por los
docentes, pues tenían explicaciones claras;
algunos dijeron que fueron buenas, porque
contenían explicaciones adicionales y, en
menor porcentaje, que regulares, ya que eran
borrosas y no entendían su contenido. Un alto
número de estudiantes manifestó que en las
guías se notaba la preparación de los docentes
al realizarlas. Ninguno expresó que una de las
causas de su deserción del plantel haya estado
relacionada con la manera como se realizó el
proceso de enseñanza-aprendizaje optado por
la institución.
Además, se indagó acerca de las acciones
ejecutadas por el gobierno nacional y municipal
en tiempo de pandemia, para enfrentar el
nuevo reto que tuvo la educación, ante lo que
contestaron que fueron buenas, ya que con
el cierre de las instituciones educativas se
evitaba el contagio. Se destacó la entrega de
una tarjeta sim que hizo el gobierno municipal
para que los estudiantes tuvieran contacto con
los docentes, pero la mayoría no contaban
con celulares que les sirvieran para usarla.
Algunos calicaron las acciones de regulares,
dado que no notaron la presencia del Estado
en esta época, para poder mitigar el problema
que presentaba la educación, aunque otros
estudiantes opinaron que estuvieron entre
malas y pésimas, al no contar con el Plan de
Alimentación Escolar (PAE) como sí sucedió en
otros departamentos y, no recibieron ningún
otro tipo de ayuda que les permitiera seguir
con su proceso de enseñanza-aprendizaje.
Finalmente, teniendo en cuenta que existen
causas externas relacionadas con sucesos fuera
del medio educativo y, causas internas, es decir,
dentro de la institución, se puede concluir que
la deserción estuvo vinculada mayormente con
las primeras, al evidenciar que los estudiantes
no contaron con un dispositivo tecnológico
para estar en contacto con los docentes; junto
a ello, estuvo la poca o inexistente conexión a
internet; algunos tuvieron que dejar de estudiar
para ayudar económicamente a sus padres,
ya que estos debieron cerrar sus negocios o
desplazarse a las ncas para conseguir el
alimento. Aunque un porcentaje menor de los
estudiantes lo sostuvo, el hecho de cambiar
su estilo de vida, pasar de vivir en el sector
urbano para desplazarse al sector rural, ncas
o, perder algún pariente, fueron algunas de
las causas que los llevaron a retirarse del año
escolar. Al revisar lo arrojado por las encuestas
realizadas a padres de familia, se encontró
información directamente relacionada con lo